Tras ocho rondas de conversaciones indirectas entre Teherán y Washington desde abril, siguen existiendo diferencias sobre la velocidad y el alcance del levantamiento de las sanciones a Teherán, incluida la exigencia de Irán de una garantía de Estados Unidos de que no habrá más medidas punitivas, y sobre cómo y cuándo restablecer los frenos a los trabajos atómicos de Irán.

Las conversaciones se interrumpieron el 28 de enero porque los principales negociadores regresaron a sus respectivas capitales para realizar consultas. El domingo, el enviado especial de Estados Unidos para Irán, Robert Malley, dijo que volvería pronto a Viena, insistiendo en que el pacto aún podría reactivarse.

"La cuestión de la eliminación de las sanciones y de que Irán se beneficie de ella es la línea roja de Irán en las conversaciones", dijo el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Saeed Khatibzadeh, en una conferencia de prensa semanal.

"Si Estados Unidos vuelve a Viena con una decisión política y una agenda específica... para eliminar las sanciones, entonces seguramente será posible alcanzar un acuerdo rápidamente".

El principal negociador nuclear de Irán, Ali Bagheri Kani, volvería a Viena el martes, dijo Khatibzadeh.

La administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reintrodujo el viernes la exención de sanciones a Irán para permitir proyectos internacionales de cooperación nuclear, mientras las conversaciones indirectas entre Estados Unidos e Irán sobre un acuerdo nuclear internacional de 2015 con Teherán entran en la recta final.

"Washington ha decidido dar un paso que no tiene ninguna repercusión en la situación económica de Irán", dijo Khatibzadeh, haciéndose eco del ministro de Asuntos Exteriores iraní, Hossein Amirabdollahian, que el domingo calificó la medida estadounidense de "buena pero insuficiente".

Irán ha violado gradualmente los límites nucleares del pacto nuclear como reacción a la retirada en 2018 del acuerdo entre Teherán y seis potencias por parte del entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y a la reimposición de sanciones paralizantes contra Irán.

Irán insiste en la eliminación inmediata de todas las sanciones de la era Trump en un proceso verificable. Washington ha dicho que eliminaría las restricciones incompatibles con el pacto de 2015 si Irán reanuda el cumplimiento del acuerdo, dando a entender que dejaría en vigor otras como las impuestas en virtud de medidas contra el terrorismo o los derechos humanos.

Khatibzadeh rechazó las advertencias de los funcionarios occidentales de que se está agotando el tiempo para resucitar el pacto, dados los avances nucleares de Teherán.

"No consideramos ningún plazo falso ... Esta ronda puede ser la última si las otras partes cumplen sus obligaciones y ofrecen garantías a Irán", dijo.