Las compras de fondos y la mejora de la demanda de carne de cerdo estadounidense han contribuido a elevar el contrato de abril, el más negociado, cerca de un 15% desde principios de año.
Los cerdos magros de abril se establecieron a la baja 0,375 centavos a 85,900 centavos por libra el martes. Los cerdos de junio cerraron 0,525 centavos por debajo, a 99,325 centavos, tras subir antes a su precio más alto en casi un año.
Algunos operadores dijeron que los datos mensuales de EE.UU. sobre los suministros de carne en instalaciones frigoríficas, publicados tras el cierre de las operaciones del lunes, parecían favorecer los precios de los futuros.
Los suministros totales de carne de cerdo congelada, hasta el 31 de enero, habían bajado un 10% respecto al año pasado, situándose en 468 millones de libras, mientras que los suministros de costillas de cerdo congeladas habían bajado un 23%, situándose en unos 89,2 millones de libras.
En cuanto a la carne de vacuno, los suministros congelados de unos 475,4 millones de libras descendieron un 11% respecto al año anterior y fueron los más bajos para finales de enero desde 2014, según los datos del USDA.
Los ganaderos estadounidenses redujeron la cabaña ganadera del país a su nivel más bajo en más de 70 años, ya que la sequía redujo la cantidad de pastos disponibles para el pastoreo.
Los empacadores de carne sacrificaron unas 125.000 reses el martes, por debajo de las 126.094 de hace un año, dijo el USDA. Los empacadores perdían unos 67,65 dólares por cabeza al procesar los animales para convertirlos en carne de vacuno, frente a las pérdidas de 106,65 dólares por cabeza de hace una semana, según HedgersEdge.com.
El ganado vivo de abril de la CME terminó con un descenso de 0,375 centavos, a 187,725 centavos por libra. El contrato cotizó antes cerca de un máximo de cuatro meses alcanzado la semana pasada.
El ganado de engorde de abril cerró 0,05 centavos más alto, a 258,950 centavos por libra, tras subir el lunes al nivel más alto desde octubre.
En otras noticias, el ministerio de Asuntos Exteriores de Brasil dijo que había sido informado de que el gobierno chino había decidido no renovar una medida antidumping aplicada a las exportaciones avícolas del país sudamericano.
