No es la primera vez que el BaFin toma medidas para prohibir un producto a los inversores minoristas, pero se produce en un momento en que el organismo de vigilancia se centra cada vez más en la protección de los consumidores tras una renovación y una nueva dirección.

BaFin dijo que tales futuros, cuyo comercio asciende a unos 80.000 millones de euros al año, exponen a los inversores a un "riesgo sustancial".

"En situaciones de mercado muy volátiles, estos productos pueden dar lugar a pérdidas ilimitadas", afirmó.

Los contratos de futuros son acuerdos para comprar o vender un activo o una materia prima en una fecha determinada y permiten a los inversores pronunciarse sobre los precios futuros.

Los corredores en línea de Alemania han aumentado recientemente su oferta de productos de futuros.

La BaFin publicó el jueves un borrador de la orden y da de plazo a los participantes en el mercado hasta el 17 de marzo para presentar sus comentarios.

La BaFin ya prohibió la venta de contratos financieros por diferencias (CFD) en 2017, haciendo uso de nuevos y amplios poderes de protección del consumidor.