En una presentación en el tribunal federal de Manhattan, la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. dijo que Musk no había cumplido con su "alta carga" para dejar de lado un decreto de consentimiento de 2018 que requiere que los abogados de Tesla aprueben los tweets y otras declaraciones públicas que podrían ser materiales para su compañía de automóviles eléctricos.
No basta con que Musk encontrara el cumplimiento "menos conveniente de lo que esperaba" o deseara que la SEC dejara de investigar los procedimientos de divulgación de Tesla.
"Cuando se trata de acuerdos civiles, un acuerdo es un acuerdo, a falta de circunstancias mucho más convincentes que las que aquí se presentan", dijo la SEC.
La agencia reguladora también instó a la jueza de distrito Alison Nathan, que supervisa el decreto, a rechazar el intento de Musk de anular una citación solicitando registros relativos a su sondeo en Twitter el pasado noviembre sobre si vender o no el 10% de sus acciones de Tesla.
Alex Spiro, abogado de Musk, declinó hacer comentarios. Tesla no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios. Expertos legales han dicho que es poco probable que Musk consiga que se anule el decreto.
Anteriormente, el martes, Musk bailó y bromeó con los fans mientras supervisaba la inauguración de la primera fábrica europea de Tesla, situada cerca de Berlín, con la asistencia del canciller alemán, Olaf Scholz.
Tesla también tiene una fábrica en Shanghai. La empresa ha convertido a Musk en la persona más rica del mundo, según la revista Forbes.
La disputa con la SEC se deriva de la afirmación del regulador de que Musk defraudó a los inversores el 7 de agosto de 2018 al tuitear que tenía "financiación asegurada" para llevar potencialmente a su compañía de coches eléctricos a la bolsa con una prima, cuando en realidad no estaba cerca una compra.
Tesla y Musk llegaron a un acuerdo pagando cada uno una multa civil de 20 millones de dólares, y Musk dimitió como presidente de Tesla.
Desde entonces, Musk ha acusado a la SEC de acosarle con investigaciones "itinerantes y sin límites", en un esfuerzo de mala fe por castigarle por criticar al Gobierno y ejercer su derecho constitucional a la libertad de expresión en virtud de la Primera Enmienda.
Pero la SEC dijo que tiene una amplia autoridad y un "propósito legítimo" para investigar a Musk y Tesla, y que Musk podría oponerse a la citación sólo a través de una acción de ejecución de la citación.
"Musk se queja de 'la gran cantidad de demandas' de la SEC desde 2018 hasta el presente, que él caracteriza como acoso", dijo la SEC.
"Pero la propia cronología de Musk de supuestas demandas es a la vez abrumadora y refleja indagaciones legítimas en cuanto a nuevas conductas potencialmente violatorias por parte de Tesla y Musk", añadió.
La citación estaba relacionada con el tuit de Musk en el que decía que se desharía del 10% de su participación en Tesla si los usuarios lo aprobaban.
Una mayoría lo hizo, y la encuesta hizo caer el precio de las acciones de Tesla. Desde entonces, Musk ha vendido más de 16.000 millones de dólares en acciones de Tesla.
