LONDRES, 1 mar (Reuters) - La actividad de las fábricas de la zona euro se aceleró en febrero gracias al aumento de la demanda, según un estudio publicado el lunes, aunque la aceleración de la actividad provocó una escasez de materias primas y un aumento de los costes de los insumos.

Las medidas de confinamiento impuestas en todo el continente para tratar de frenar la propagación del coronavirus han paralizado amplias franjas de la industria de servicios dominante en el bloque, lo que significa que la economía ha dependido en gran medida del sector manufacturero.

La lectura final del Índice de Gestores de Compras (PMI) del sector manufacturero de IHS Markit subió a un máximo de tres años de 57,9 en febrero desde el 54,8 de enero, por delante de la estimación inicial de 57,7. La cifra constituye una de las lecturas más altas en los 20 años de historia de la encuesta.

El índice que mide la producción, que alimenta el PMI compuesto que se publicará el miércoles y que se considera una buena guía de la salud económica, subió desde 54,6 a 57,6, muy por encima de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.

Un sondeo de Reuters del mes pasado mostraba que el bloque se encontraba en una doble recesión y que la economía se contraería un 0,8% este trimestre, tras contraerse un 6,9% en 2020 en términos anuales. [ECILT/UE]

El aumento de la demanda de productos manufacturados empujó a las fábricas a aumentar sus plantillas por primera vez en casi dos años.

Sin embargo, las medidas de confinamiento interrumpieron las cadenas de suministro y las fábricas tuvieron dificultades para obtener materias primas, lo que provocó un gran retraso en los plazos de entrega.

Esa escasez permitió a los proveedores subir sus precios al ritmo más rápido en casi una década. El PMI de los precios de los insumos repuntó desde 68,3 a 73,9.

(Información de Jonathan Cable; editado por Hugh Lawson, traducido por Michael Susin en la redacción de Gdansk)