La actividad de los servicios en China repuntó en mayo, según mostró el lunes una encuesta del sector privado, ya que un aumento de los nuevos pedidos apuntaló una recuperación económica impulsada por el consumo en el segundo trimestre.

El índice de gestores de compras (PMI) de servicios Caixin/S&P Global subió a 57,1 en mayo desde los 56,4 de abril. La marca de 50 puntos separa la expansión de la contracción de la actividad.

La encuesta, que se basó en las respuestas recogidas entre el 12 y el 22 de mayo, contrasta con el PMI oficial publicado la semana pasada que mostró un menor ritmo de expansión en el sector servicios.

"Tras un repunte brusco pero desequilibrado en el 1T23, la recuperación del consumo en China está entrando en la segunda fase, que será más endógena e impulsada por un aumento más amplio del empleo", afirmaron los analistas de Morgan Stanley en una nota el domingo.

Bruce Pang, economista jefe de Jones Lang LaSalle, dijo que los diferentes tamaños de las encuestas podrían explicar la discrepancia entre las lecturas del PMI de Caixin y las oficiales. El PMI Caixin encuesta a unas 650 empresas de servicios privadas y estatales, mientras que el PMI oficial encuesta a 4.300 empresas.

"El descenso del índice oficial sugiere que las empresas más grandes y las situadas en el interior se enfrentan a los mayores vientos en contra", declaró Sheana Yue, economista para China de Capital Economics, añadiendo que una caída significativa del componente de la construcción tiró a la baja del índice oficial.

Algunos economistas advierten de que la demanda reprimida de servicios en el interior puede desvanecerse debido a la ralentización del crecimiento de los ingresos y al aumento del desempleo, lo que planteará quebraderos de cabeza a los responsables políticos que ya luchan contra la débil demanda exterior y una recuperación desigual tras el COVID.

La encuesta de Caixin mostró que las empresas de servicios registraron un aumento de nuevos negocios el mes pasado, cuando el primer festivo del Primero de Mayo tras la reapertura de la COVID en China impulsó los pedidos de hoteles, restaurantes y agencias de viajes.

El aumento de la carga de trabajo llevó a las empresas a incrementar su plantilla por cuarto mes consecutivo, aunque la velocidad de creación de empleo se ralentizó.

Los precios medios cobrados por las empresas de servicios subieron al ritmo más rápido desde febrero de 2022.

La encuesta también indicó que persistían las presiones sobre la capacidad, como puso de manifiesto el crecimiento sostenido de los negocios pendientes.

El PMI compuesto de Caixin/S&P, que incluye tanto la actividad manufacturera como la de servicios, repuntó hasta 55,6 desde 53,6 en abril, marcando la expansión más rápida desde diciembre de 2020.

Aunque las empresas del sector servicios se mantuvieron optimistas sobre el negocio en los próximos 12 meses, el nivel de optimismo se redujo al más bajo desde diciembre de 2022, cuando Pekín levantó las restricciones antivirus.

La economía china repuntó más rápido de lo previsto en el primer trimestre, pero perdió impulso a principios del segundo, ya que los datos de abril incumplieron ampliamente las previsiones.

La actividad de las fábricas en mayo se contrajo más rápido de lo previsto por el debilitamiento de la demanda.

"En general, sigue siendo una característica destacada de la economía china que el sector servicios sea más fuerte que el manufacturero", afirmó Wang Zhe, economista jefe de Caixin Insight Group.

"Esta divergencia pone de manifiesto que el crecimiento económico carece de impulso interno y que las entidades del mercado carecen de la confianza suficiente, lo que subraya la importancia de ampliar y restablecer la demanda", añadió.