La bolsa argentina de cereales de Buenos Aires advirtió de nuevo el jueves que podría recortar su previsión para la cosecha de soja de 2023/24, actualmente en 51 millones de toneladas métricas, ya que el clima cálido y la falta de lluvias en el norte del país han provocado rendimientos inferiores a los esperados.

Argentina, junto con el vecino Brasil, es uno de los dos principales exportadores mundiales de aceite y harina de soja.

En el noreste de Argentina "hay retrasos en la cosecha con rendimientos por debajo de las estimaciones. De continuar esta tendencia con el avance de las labores, nuestra proyección actual podría verse afectada", señaló la Bolsa en su informe semanal de cultivos.

Hasta el miércoles, los productores habían cosechado el 47,8% de la superficie sembrada con soja, 13 puntos porcentuales por detrás del ritmo medio de cosecha de los últimos cinco años, según la bolsa.

Mientras tanto, la cosecha de maíz para el ciclo 2023/24 está completada en un 23,4% y ha progresado lentamente durante la última semana debido a los altos niveles de humedad en los granos tras las fuertes lluvias de abril.

La semana pasada, la bolsa de cereales de Buenos Aires recortó su estimación para la cosecha de maíz 2023/24 en 3 millones de toneladas, hasta las 46,5 toneladas, citando los efectos de una dañina plaga del insecto chicharrita y el impacto del clima.

Argentina es el tercer exportador mundial de maíz, después de Brasil y Estados Unidos.

La bolsa de cereales rival de Rosario dijo en un informe ligeramente más positivo que las perspectivas meteorológicas eran prometedoras para la demorada cosecha de lotes de soja en las principales regiones agrícolas del país, ya que se esperan menos lluvias y temperaturas más bajas.

Agregó que se había recolectado un 82% de la soja temprana y un 55% de la soja tardía, muy por detrás del promedio para la misma fecha en las últimas cinco campañas, del 100% y el 80% respectivamente.

"La buena noticia es que la interrupción de las lluvias en los próximos días permitirá terminar la recolección de la primera cosecha antes de que finalice la primera quincena de mayo y sin añadir mayores quebraderos de cabeza a los productores", señaló.

También dijo que la llegada de un frente frío con heladas generalizadas ayudaría a reducir el número de insectos saltahojas que han azotado la cosecha de maíz. "Esta es una oportunidad para reducir la población de chicharritas y disminuir el riesgo para la próxima siembra de maíz". (Reportaje de Maximilian Heath; Edición de Marguerita Choy)