Sly Bailey -directora ejecutiva de Trinity Mirror, editor del Daily Mirror, Sunday Mirror y Sunday People, entre 2003 y 2012- declaró ante el Tribunal Superior de Londres que las acusaciones de recopilación ilegal de información eran "motivo de gran pesar".

"Es bastante devastador como directora ejecutiva, en realidad, estar sentada aquí y escuchar esto, y estoy profundamente arrepentida y pido disculpas en nombre de la empresa", dijo.

"Espero que la gente entienda que yo no tenía conocimiento de estas actividades".

Harry, el hijo menor del rey Carlos, y más de otras 100 personas han demandado a Mirror Group Newspapers (MGN), acusando a sus cabeceras de pirateo telefónico y otros comportamientos ilegales entre 1991 y 2011, con la aprobación de altos ejecutivos.

MGN, propiedad de Reach y conocida como Trinity Mirror hasta 2018, niega rotundamente las acusaciones.

Bailey dijo en su declaración como testigo que "a pesar de nuestros sólidos sistemas de gobernanza, varias personas de la parte editorial de las cabeceras nacionales me ocultaron a mí y a otros colegas sus actividades ilícitas".

Presionada en repetidas ocasiones por David Sherborne, abogado que representa a Harry y a otros demandantes, sobre lo que sabía de la actividad ilegal en sus periódicos y qué medidas había tomado para solucionarlo, dijo que no tenía conocimiento específico de las acusaciones mientras era directora ejecutiva.

Sherborne se refirió a un artículo de 2006 en el que se citaba a un antiguo reportero del MGN diciendo que "muchas de las historias del Daily Mirror procedían del pirateo del buzón de voz de un famoso".

El abogado dijo a Bailey que las acusaciones debían de haber sido discutidas por el consejo de Trinity Mirror.

Bailey dijo que no recordaba que lo hubieran sido, y en respuesta a las preguntas sobre por qué los directivos no habían investigado más después de que tres reporteros fueran interrogados pero no acusados, respondió: "No soy policía".

Añadió que tanto ella como los antiguos miembros de la junta directiva habían sido objeto de "terribles calumnias".

El caso, que durará unas siete semanas, se centra inicialmente en las acusaciones genéricas contra MGN antes de pasar a las denuncias específicas de Harry y otros tres casos de prueba.

Está previsto que el propio Harry preste declaración en persona a principios de junio, siendo el primer miembro de la realeza británica en hacerlo desde el siglo XIX.