Los medios de comunicación estatales chinos restaron importancia el martes a la gravedad de un repunte de los contagios por el virus COVID-19, lo que disparó las esperanzas de que la recuperación posterior a la pandemia en China sirviera de apoyo a la economía mundial.

"La caída de ayer frente al dólar fue un poco excesiva y no especialmente justificada, impulsada por flujos especulativos en una negociación poco intensa", dijo Matthew Ryan, jefe de estrategia de mercado de la firma de servicios financieros Ebury.

"Hoy, la libra está volviendo a niveles más realistas".

La libra subió un 0,75%, hasta 1,2059 dólares, tras caer más de un 1% el martes, hasta 1,1900 dólares, su nivel más bajo desde finales de noviembre.

El dólar cayó y el euro se estabilizó el miércoles, mientras que las divisas de mayor riesgo rebotaron.

"Somos alcistas con la libra, ya que los mercados siguen preparándose para el peor escenario posible de una profunda recesión en el Reino Unido, lo que nos parece excesivamente pesimista", argumentó Ryan, de Ebury.

"En su lugar, pronosticamos una recesión poco profunda, en parte debido a la fuerte caída de los precios del gas en el Reino Unido y a la decente cantidad de apoyo fiscal que sigue vigente", añadió.

Sin embargo, los analistas de ING advirtieron de una posible tendencia bajista de la libra frente al dólar estadounidense.

"El ciclo de relajación (de la política monetaria) de la Reserva Federal previsto a partir del verano de 2023 podría reducirse un poco", dijeron en una nota de investigación.

La libra subió un 0,15% frente al euro, hasta los 88,01 peniques por euro, tras alcanzar el martes un máximo de dos semanas en 88,61.

Los datos de inflación alemanes del martes, más fríos de lo esperado, dispararon las expectativas de que la senda de endurecimiento del Banco Central Europeo podría ser menos agresiva, lo que apoyó a la libra.

"El comportamiento de la libra esterlina (frente al euro) este año dependerá probablemente de lo pronto que el Banco de Inglaterra (BoE) pueda dejar de endurecer su política monetaria y de lo rápido que puedan crecer las expectativas de un ciclo de relajación", según los analistas de ING.

Los inversores ven posibles señales alcistas para la moneda única frente a la libra esterlina si el BCE sigue subiendo los tipos mientras que el BoE ofrece comunicaciones mixtas.

Los responsables políticos del BCE dijeron recientemente que se producirían más subidas de tipos después de que el banco central elevara en diciembre el tipo que paga por los depósitos bancarios en 50 puntos básicos, hasta el 2%.