Las principales asociaciones patronales holandesas advirtieron el lunes en una carta al Parlamento de que problemas como los elevados impuestos sobre la electricidad y los problemas con la red eléctrica del país están desalentando la inversión empresarial en Holanda.

La carta, redactada conjuntamente por el sindicato de grandes empresarios y el sindicato de medianos empresarios, se produce antes de un debate parlamentario el miércoles sobre los cuellos de botella en la red eléctrica causados en parte por el rápido crecimiento de la producción de electricidad renovable.

"Los Países Bajos destacan negativamente en una serie de puntos en relación con sus vecinos, pero en particular en los costes energéticos", escribieron los grupos patronales, señalando que la producción industrial lleva 11 meses consecutivos de descenso y que salen del país más inversiones de las que entran.

"No es tanto que las empresas se marchen a gran escala, sino que sus ampliaciones e inversiones de sustitución tienen lugar fuera de los Países Bajos debido en parte a la red eléctrica sobrecargada, la dificultad para obtener permisos y la falta de una política estable".

Los operadores regionales de la red eléctrica del país tienen dificultades para satisfacer la demanda de las empresas y los proyectos de viviendas en varias provincias.

El operador de la red de alta tensión TenneT afirma que se necesitan nuevas soluciones para hacer frente a los picos y caídas de la producción eléctrica de origen eólico y solar, que probablemente superará el 50% del total del país este año.

Las conversaciones para que el gobierno holandés venda a Alemania la operación de TenneT se han estancado tras la crisis presupuestaria alemana, lo que ha llevado al gobierno holandés a conceder este mes a TenneT un nuevo préstamo de 25.000 millones de euros (27.000 millones de dólares) para continuar sus inversiones en la red en 2024 y 2025.

(1 dólar = 0,9180 euros) (Reportaje de Toby Sterling; Edición de Kirsten Donovan)