Los informes de ganancias muestran que la gente pasa menos tiempo viendo la televisión o comprando alimentos por Internet, ya que reanudan las cenas fuera de casa o planifican las vacaciones tras salir de las restricciones por el coronavirus. Las compras de lujo de los grandes consumidores chinos, que aún no pueden viajar al extranjero, también están repuntando.
Las aerolíneas de Asia-Pacífico están ofreciendo más vuelos a medida que algunos países reanudan los viajes nacionales, y algunos como Singapur permiten viajar sin cuarentena a determinados visitantes vacunados. La reapertura prevista de las fronteras estatales e internacionales de Australia ha provocado un aumento de las reservas.
"Hay una demanda masiva de seres queridos que quieren reunirse por Navidad", dijo la semana pasada Alan Joyce, director general de la aerolínea australiana Qantas. "Hay una demanda de personas que quieren tomarse esas vacaciones que llevan deseando desde hace casi dos años".
No cabe duda de que aún faltan meses para que se produzca una recuperación del sector turístico en Asia, y el enorme mercado de viajes interno de China sigue siendo un factor de inestabilidad. Además, las empresas, entre ellas McDonald's, siguen luchando contra los frecuentes y temporales recortes que los países imponen para controlar los brotes.
Sin embargo, las acciones de las aerolíneas de la región de Asia-Pacífico subieron casi un 5% en los últimos tres meses, mientras que las aerolíneas mundiales cayeron un 6% debido a un retorno más lento de lo esperado de los viajes corporativos.
El índice más amplio MSCI All Country Asia Pacific Price Index subió aproximadamente un 2% en el mismo periodo.
Las casas de moda europeas, como LVMH y Kering, han señalado que sigue habiendo una fuerte demanda en China, ya que el apetito por los artículos de lujo se mantiene en gran medida, a pesar de que la escasez de energía y la crisis del sector inmobiliario están afectando a la economía.
"La población china y sus clases medias están aumentando y su apetito por la belleza no está satisfecho", dijo la semana pasada el director general de L'Oreal, Nicolas Hieronimus.
Hieronimus espera que el reciente cambio en la política del gobierno chino para reducir la brecha entre ricos y pobres impulse la clase media, un sentimiento del que se hace eco LVMH.
La empresa japonesa Fast Retailing registró beneficios récord en China el pasado trimestre, donde abrirá su primera tienda insignia el mes que viene. El gigante japonés de la cosmética, Shiseido Co, cree que el próximo verano será un "punto de inflexión" con el regreso de los turistas chinos.
GANADORES TEMPRANOS
Las empresas de todo el mundo se enfrentan a una grave escasez de mano de obra, a cuellos de botella en el suministro y a atascos marítimos, a medida que las economías se recuperan de los bajos niveles de la pandemia, lo que se traduce en un fuerte aumento de los costes. Una prolongada escasez de chips ha perturbado la industria automovilística y ha afectado a la producción de los principales fabricantes de automóviles de todo el mundo.
Para los supermercados, uno de los primeros ganadores de la pandemia cuando la gente se apresuró a almacenar alimentos y papel higiénico, es probable que el aumento de la inflación compense parte de la desaceleración posterior a la pandemia.
El supermercado australiano Woolworths dijo el miércoles que las ventas de alimentos empezaron a ralentizarse en octubre. Sus acciones han caído un 10% desde mediados de agosto, cuando el ritmo de las vacunaciones empezó a aumentar. Las acciones subieron casi un 40% durante los 17 meses anteriores, cuando estaban vigentes las restricciones por el coronavirus.
"La gran pregunta ahora es cuánta gente volverá a las oficinas, cómo se desarrollará eso en términos de consumo en casa", dijo el analista de retail de Morningstar, Johannes Faul.
Sin embargo, es poco probable que los ganadores de la pandemia se conviertan en perdedores de la noche a la mañana, dijo Jason Teh, director de inversiones de Vertium Asset Management en Sydney. Pero las tendencias de trabajar desde casa que beneficiaron a empresas como el minorista australiano de productos electrónicos JB Hi-Fi estaban disminuyendo a medida que aumentaba la vacunación, dijo.
Las ventas de teléfonos inteligentes en China en el tercer trimestre cayeron un 9% respecto al año anterior, según Counterpoint Research.
Aunque es probable que la demanda reprimida por los cuellos de botella de la oferta respalde un trimestre festivo estacionalmente fuerte, las ventas están empezando a ralentizarse en los fabricantes de chips y los proveedores de componentes, como la surcoreana Samsung Electronics y LG Display.
"Se espera que los paneles LCD para televisores sufran nuevos descensos en el cuarto trimestre, ya que las personas vacunadas han empezado a pasar menos tiempo frente a las pantallas", dijo Park Sung-soon, analista de Cape Investment & Securities con sede en Seúl.
