La mayor parte de la deuda -800 millones de dólares- está contraída con Afriximbank, y los reembolsos comenzaron en 2020, afirmó.

El Banco de la Reserva de Malaui afirmó en su comunicado que las negociaciones habían sido muy positivas y que los acreedores estaban dispuestos a ayudar al país a alcanzar la sostenibilidad de la deuda.

"El Gobierno de Malaui sigue siendo optimista en cuanto a que las discusiones concluirán con términos aceptables tanto para el Gobierno como para los acreedores", decía el comunicado.

El servicio de la deuda y de otras formas de préstamo se ha visto limitado por la falta de divisas, que ha afectado a las operaciones del gobierno, según el banco.

"(Los) pagos del servicio de la deuda, que vencían después de junio de 2020, han agotado las reservas de divisas y están afectando a la actual prestación de servicios por parte del Gobierno".

Malaui, un país sin litoral e importador neto, está experimentando una grave escasez de importaciones clave como combustible, medicinas y fertilizantes debido a la falta de divisas. Esto ha provocado largas colas de automovilistas en las gasolineras y robos en las mismas.