DUBÁI, 11 oct (Reuters) - Israel calificó al devastador ataque de Hamás de la semana pasada como su momento del 11-S mientras que el organizador del ataque, el militante de Hamás Mohammed Deif, lo llama el Diluvio de Al Aqsa.

La frase que el hombre más buscado por Israel usó en un audio difundido mientras Hamás disparaba miles de cohetes desde la franja de Gaza el sábado señalaba que el ataque era una venganza por las incursiones israelíes en la mezquita de Al Aqsa de Jerusalén.

Fue en mayo de 2021, tras una incursión israelí en el tercer lugar más sagrado del Islam que enfureció al mundo árabe y musulmán, cuando Deif comenzó a planear la operación en la que murieron al menos 1.200 personas y fueron heridas más de 2.700 en Israel, dijo una fuente cercana a Hamás.

"Lo desencadenaron las escenas y las imágenes de Israel asaltando la mezquita de Al Aqsa durante el Ramadán, atacando a los fieles, sacando a rastras a ancianos y jóvenes de la mezquita", dijo la fuente de Gaza. "Todo esto avivó y encendió la ira".

El asalto al recinto de la mezquita, durante mucho tiempo un foco de violencia por cuestiones de soberanía y religión en Jerusalén, contribuyó a desencadenar 11 días de enfrentamientos entre Israel y Hamás.

Más de dos años después, el asalto del sábado, la peor brecha en las defensas israelíes desde el conflicto árabe-israelí de 1973, llevó a Israel a declarar la guerra y lanzar ataques aéreos de represalia contra Gaza que han dejado al menos más de 1.055 muertos y 5.000 heridos.

Israel también dijo el miércoles que había matado al menos a 1.000 militantes palestinos infiltrados desde Gaza.

Deif, superviviente de siete intentos de asesinato israelíes, el más reciente en 2021, rara vez habla y nunca aparece en público. Así que cuando el canal de televisión de Hamás anunció que lo iba a hacer el sábado, los palestinos supieron que algo importante ocurría.

"Hoy estalla la rabia de Al Aqsa, la rabia de nuestro pueblo y de nuestra nación. Muyahidines (combatientes), hoy es su día para hacer comprender a este criminal que su tiempo ha terminado", dijo Deif en la grabación.

Sólo hay tres imágenes de Deif: una con 20 años, otra de él con la cara cubierta y una de su sombra, que se utilizó cuando se difundió la cinta de audio.

Se desconoce el paradero de Deif, aunque lo más probable es que se encuentre en Gaza, en el laberinto de túneles bajo el enclave. Una fuente de seguridad israelí dijo que Deif participó directamente en la planificación y los aspectos operativos del atentado.

Fuentes palestinas dijeron que una de las casas alcanzadas por los ataques aéreos israelíes en Gaza pertenecía al padre de Deif. Su hermano y otros dos miembros de la familia murieron, según las fuentes.

DOS CEREBROS, UNA MENTE MAESTRA

La fuente cercana a Hamás dijo que la decisión de preparar el ataque fue tomada conjuntamente por Deif, que comanda las Brigadas Al Qassam de Hamás, junto con Yehya Sinwar, líder del grupo en Gaza, pero que estaba claro quién era el artífice.

"Hay dos cerebros, pero hay una sola mente maestra", dijo la fuente, que añadió que la información sobre la operación sólo era conocida por un puñado de dirigentes de Hamás.

El secretismo era tal que Irán, enemigo acérrimo de Israel e importante fuente de financiación, entrenamiento y armamento para Hamás, solo sabía en términos generales que el movimiento estaba planeando una operación de gran envergadura y desconocía el calendario y los detalles, según una fuente regional familiarizada con las discusiones del grupo.

La fuente afirmó que, aunque Teherán era consciente de que se estaba preparando una operación importante, no se habló de ella en ninguna de las salas de operaciones conjuntas en las que participaban Hamás, los dirigentes palestinos, Irán y Hezbolá, militantes libaneses respaldados por la república islámica.

"Era un círculo muy cerrado", dijo la fuente.

La máxima autoridad iraní, el ayatolá Alí Jamenei, afirmó el martes que Teherán no participó en el ataque contra Israel. Washington ha dicho que, aunque sea cómplice, no dispone de información o pruebas que apunten a la participación directa de Irán en los atentados.

El plan concebido por Deif supuso un largo esfuerzo de engaño. Se hizo creer a Israel que Hamás, enemigo jurado de Israel, no estaba interesado en iniciar un conflicto y se centraba en cambio en el desarrollo económico de Gaza, donde el movimiento gobierna.

Pero mientras Israel empezaba a ofrecer incentivos económicos a los trabajadores gazatíes, los combatientes del grupo se entrenaban y adiestraban, a menudo a la vista de los militares israelíes, dijo una fuente cercana a Hamás.

"Llevamos dos años preparándonos para esta batalla", dijo Ali Baraka, responsable de relaciones exteriores de Hamás.

Hablando con voz tranquila, Deif dijo en su grabación que Hamás había advertido repetidamente a Israel que pusiera fin a sus crímenes contra los palestinos, que liberara a los presos, de los que dijo que sufrían abusos y torturas, y que detuviera las expropiaciones de tierras palestinas.

"Todos los días la ocupación irrumpe en nuestros pueblos, ciudades y aldeas de Cisjordania y asalta casas, mata, hiere, destruye y detiene. Al mismo tiempo, confisca miles de acres de nuestra tierra, desarraiga a nuestra gente de sus casas para construir asentamientos mientras continúa su criminal asedio a Gaza."

EN LA SOMBRA

Desde hace más de un año, Cisjordania, una zona de unos 100 kilómetros de largo y 50 kilómetros de ancho que ha estado en el centro del conflicto palestino-israelí desde que Israel se apoderó de ella en 1967, está sumida en la confusión.

Deif afirmó que Hamás había instado a la comunidad internacional a poner fin a los "crímenes de la ocupación", pero que Israel había intensificado sus provocaciones. Además, dijo que el grupo había pedido en el pasado a Israel un acuerdo humanitario para liberar a presos palestinos, pero que éste fue rechazado.

"Ante la orgía de la ocupación y su negación de las leyes y resoluciones internacionales, y ante el apoyo estadounidense y occidental y el silencio internacional, hemos decidido poner fin a todo esto", afirmó.

Nacido como Mohammad Masri en 1965 en el campo de refugiados de Jan Yunis, establecido tras la guerra árabe-israelí de 1948, el líder militante pasó a ser conocido como Mohammed Deif tras unirse a Hamás durante la primera Intifada, o levantamiento palestino, que comenzó en 1987.

Fue detenido por Israel en 1989 y pasó unos 16 meses recluido, según una fuente de Hamás.

Deif se licenció en ciencias en la Universidad Islámica de Gaza, donde estudió física, química y biología. Demostró afinidad por las artes, dirigió el comité de entretenimiento de la universidad y actuó en comedias.

Deif ascendió en las filas de Hamás, desarrolló la red de túneles del grupo y prestó su experiencia en la fabricación de bombas. Ha encabezado la lista de los más buscados de Israel durante décadas, al ser considerado personalmente responsable de la muerte de docenas de israelíes en atentados suicidas.

Para Deif, permanecer a la sombra ha sido una cuestión de vida o muerte. Fuentes de Hamás dijeron que perdió un ojo y sufrió graves heridas en una pierna en uno de los intentos de asesinato de Israel.

Su esposa, su hijo de siete meses y su hija de tres años murieron en un ataque aéreo israelí en 2014.

Su supervivencia mientras dirigía el brazo armado de Hamás le ha valido el estatus de héroe popular palestino. En los vídeos aparece enmascarado, o solo se ve una sombra suya. No utiliza tecnología digital moderna, como teléfonos inteligentes, dijo la fuente cercana a Hamás.

"Es escurridizo. Es el hombre en la sombra".

(Edición de William Maclean y David Clarke. Editado en español por Javier López de Lérida)