Eso es porque han provocado un frenesí de limpieza.

La demanda de marcas como Tide y Mr Clean se ha disparado.

Los consumidores se han abastecido de todo, desde detergentes hasta toallitas para superficies.

Ahora P&G está elevando su previsión de ventas anuales como resultado.

El gigante de los bienes de consumo espera que las ventas aumenten hasta un 5% este año, frente a una previsión anterior del 2-4%.

En su segundo trimestre, las ventas netas aumentaron hasta casi 21.000 millones de dólares, superando las previsiones.

Las ventas de su división de tejidos y cuidado del hogar -la mayor unidad de la firma- aumentaron un 7%.

Una temporada de gripe más intensa también hizo que las ventas de productos de salud personal se dispararan en torno a una quinta parte.

Todo ello supone un oportuno impulso para P&G, que ha estado luchando contra el aumento de los costes de las materias primas, los fletes y las divisas.

La empresa dice que espera recibir un golpe de alrededor de 2.800 millones de dólares en los tres ámbitos este año.