Los candidatos de todos los principales partidos políticos escoceses que concurren a las elecciones generales del Reino Unido están presionando a la empresa energética Petroineos para que retrase el cierre de la única refinería de petróleo de Escocia, en Grangemouth, y salve los puestos de trabajo.

La compañía operadora Petroineos -una empresa conjunta entre INEOS y PetroChina- planea cerrar la refinería de Grangemouth, de 215.000 barriles diarios, y convertirla, junto con la terminal de importación de crudo Finnart, conectada a ella, en centros de importación de combustible en 2025.

Cualquier retraso en el cese del refinado en Grangemouth reforzaría la demanda de crudo del Reino Unido y pospondría un aumento de las importaciones de combustible. La refinería situada en el estuario del Forth es importante para la fijación de los precios mundiales del petróleo, ya que procesa principalmente el petróleo Forties del Mar del Norte y el crudo WTI estadounidense, que contribuyen a apuntalar el precio de referencia mundial del petróleo Brent.

Los políticos locales que compiten por un escaño en el Parlamento en las elecciones británicas del jueves piden ahora que se prolongue el refinado hasta que el emplazamiento pueda reconvertirse y dejar de producir combustibles fósiles, alegando la necesidad de mantener los puestos de trabajo por temor a la economía local.

"Se necesita tiempo para desbloquear las importantes oportunidades para las industrias ecológicas del futuro", afirma en su manifiesto el Partido Nacional Escocés, que ganó en la circunscripción de Grangemouth en las últimas elecciones de 2019.

"Es importante que se conserve la mano de obra cualificada ampliando el refinado el mayor tiempo posible".

El cierre de la refinería no sólo amenazaría los puestos de trabajo en la planta, sino que también entrañaría riesgos para la seguridad energética, según los analistas, ya que dejaría a Escocia dependiente de las importaciones para el suministro de combustible.

Petroineos aún no ha decidido una fecha de transición, según un portavoz de la empresa, aunque cuando anunció la noticia el pasado noviembre dijo que el refinado podría cesar en la primavera de 2025.

El candidato del partido laborista, Brian Leishman, también se comprometió a prolongar la vida útil de la refinería para permitir una "transición adecuada", mientras que la candidata de los conservadores escoceses, Rachel Nunn -también partidaria de luchar contra su cierre- tachó el anuncio de cerrar el emplazamiento de "martillazo para la comunidad".

El partido laborista lidera actualmente las encuestas.

Petroineos ya ha empezado a trabajar en el negocio de la terminal, según el portavoz, aunque la empresa también está en conversaciones con los gobiernos británico y escocés para explorar opciones de fabricación de combustible bajo en carbono para el futuro.

Eugene Lindell, responsable de productos refinados de la consultora energética FGE, declaró a Reuters que una dependencia de las importaciones de combustible podría dejar los precios de los carburantes escoceses expuestos a costes de flete adicionales, ya que las importaciones de gasóleo y reactores, en particular, probablemente tendrían que proceder de lugares tan lejanos como Estados Unidos o Asia.

El sindicato Unite, que representa a 500 trabajadores de la refinería, ha criticado la lenta respuesta de los políticos al cierre, citando su importancia estratégica para la economía y la seguridad energética de Escocia.