La relajación de las restricciones relacionadas con el COVID-19 ha impulsado la demanda y los precios del petróleo, que se mantienen estables desde el repunte de finales de 2020 desde sus mínimos históricos. El crudo Brent, cuya media fue de 45 dólares por barril en el último trimestre de 2020, rondó los 55 dólares el viernes.

El director ejecutivo de Schlumberger, Olivier Le Peuch, dijo que era optimista sobre la recuperación de la demanda a lo largo de este año, como han señalado sus rivales Halliburton Co y Baker Hughes Co, lo que ha dado a los inversores la esperanza de que la caída del petróleo estaba llegando a su fin.

Sin embargo, la previsión de Le Peuch de una recuperación total hasta el nivel de 2019, a más tardar en 2023, quedó por detrás de la visión de Halliburton de un reequilibrio el próximo año. Baker Hughes también ve un fuerte crecimiento de la inversión en 2022.

Aún así, Le Peuch dijo que el reajuste podría ocurrir antes, como algunos analistas han señalado en las últimas semanas, con la recuperación internacional acelerando a partir del segundo trimestre de este año y la actividad de América del Norte sigue aumentando después de un fuerte comienzo del año.

"Nuestra hipótesis de cara al futuro es que la cuota de oferta del mercado se reequilibrará ligeramente, favorecerá la internacional y, en consecuencia, hará que la actividad internacional alcance el 100% o más en los próximos 2 o 3 años", dijo a los analistas en una llamada posterior a los resultados.

Las acciones de Schlumberger bajaban un 1,4% a 24,86 dólares en las primeras operaciones, superando a sus rivales y a otros valores energéticos que cayeron más por las últimas restricciones relacionadas con la COVID-19 en China.

Los ingresos totales de 5.530 millones de dólares en el cuarto trimestre superaron las estimaciones de los analistas de 5.250 millones de dólares. Es el primer aumento trimestral de los ingresos de Schlumberger desde el tercer trimestre de 2019.

Desde que asumió el cargo en julio de 2019, Le Peuch se ha centrado en remodelar Schlumberger a través de miles de recortes de puestos de trabajo, otros fuertes recortes de costos y la desinversión de negocios no rentables, acciones que han sido bien recibidas por Wall Street.

"Schlumberger ha dado la campanada con estos resultados", escribieron los analistas de Tudor, Pickering, Holt and Co en una nota el viernes, afirmando que los buenos resultados no fueron una gran sorpresa debido al trabajo realizado en torno a los recortes de costes y a la mejora de los márgenes y del flujo de caja de las comisiones.

Con la ayuda de los recortes de costes, los ingresos netos de Schlumberger, excluyendo cargos y créditos, fueron de 22 centavos por acción en el trimestre finalizado el 31 de diciembre, lo que también superó las estimaciones de 17 centavos, según los datos de Refinitiv IBES.

A la luz de la recuperación prevista de la demanda, Schlumberger prevé unas inversiones de capital este año de entre 1.500 y 1.700 millones de dólares, lo que supone una ligera mejora en el punto medio de la horquilla respecto a los 1.500 millones del año pasado.