La semana pasada, el tribunal emitió una orden de detención contra Putin, acusándole del crimen de guerra de deportar ilegalmente a cientos de niños de Ucrania. La medida legal obligará a los 123 Estados miembros del tribunal a detener a Putin y trasladarlo a La Haya para ser juzgado si pone un pie en su territorio.

La carta dirigida al presidente Joe Biden por los demócratas Dick Durbin, Bob Menéndez, Richard Blumenthal y Sheldon Whitehouse y los republicanos Lindsey Graham y Thom Tillis, señalaba que el Congreso aprobó una legislación para dar a la administración más flexibilidad a la hora de ayudar a la CPI.

"Sin embargo, meses después, mientras la CPI trabaja para construir casos contra funcionarios rusos, incluido el propio Putin, Estados Unidos, según se informa, aún no ha compartido pruebas clave que podrían ayudar en estos enjuiciamientos", decía la carta.

"Sabiendo de su apoyo a la importante causa de la rendición de cuentas en Ucrania, le instamos a que avance rápidamente en el apoyo a la labor de la CPI para que Putin y otros a su alrededor sepan en términos inequívocos que la rendición de cuentas y la justicia por sus crímenes están próximas", decía la carta.

Aunque Estados Unidos no es parte de la CPI, Biden dijo la semana pasada que Putin ha cometido claramente crímenes de guerra, y añadió que la orden de la CPI estaba justificada.

Moscú ha negado repetidamente las acusaciones de que sus fuerzas hayan cometido atrocidades durante su invasión de un año de su vecino y el Kremlin tachó la decisión del tribunal de "nula e inválida".

Entre los firmantes de la carta se encuentra Durbin, el demócrata número dos del Senado, que preside el Comité Judicial. Graham es el principal republicano del Comité Judicial. Menéndez preside el Comité de Relaciones Exteriores.