Yousif y otros políticos fueron detenidos en febrero tras un golpe de Estado de los líderes militares que compartían el poder con la coalición civil de la que forman parte, a raíz de su trabajo en un comité que trabaja para desmantelar el régimen de Omar al-Bashir.

Otros dos destacados miembros y ex funcionarios, Mohamed al-Faki Suleiman y Wagdi Salih, no fueron puestos en libertad y están detenidos por otros cargos, según declaró a Reuters el abogado Iqbal Ahmed. Los dos hombres criticaban abiertamente a los militares antes del golpe.

A los políticos sudaneses Babiker Faisal y Taha Othman se les ordenó pagar una "fianza prohibitiva" de 25 millones de libras sudanesas a cada uno, dijo Ahmed.

"Esta decisión indica la continuación de la política de detenciones ilegales y acusaciones malintencionadas de los golpistas", declaró en un comunicado Jaafar Hassan, portavoz de la coalición Fuerzas de la Libertad y el Cambio, añadiendo que no pagarían las fianzas.

El general Abdel Fattat al-Burhan dijo a principios de este mes que había discutido la posibilidad de la liberación de los hombres, aunque mantuvo que no eran detenidos políticos.

Burhan aún no ha nombrado a un nuevo primer ministro, ya que numerosas iniciativas para llegar a un acuerdo con los partidos políticos no han fructificado. Los donantes han exigido un gobierno civil creíble para reanudar la tan necesaria ayuda bloqueada tras el golpe.

Burhan y otros generales han criticado la labor del Comité para el desmantelamiento del régimen del 30 de junio de 1989, del que formaban parte los políticos, y han creado un nuevo comité para revisar sus decisiones. Sus miembros fueron detenidos acusados de traicionar la confianza pública.

Muchas de las decisiones del comité relativas al despido de los leales a Bashir de la función pública han sido revocadas en las últimas semanas, ya que, según los analistas, Burhan pretende apoyarse en los islamistas que estaban en el poder antes del levantamiento de 2019 para formar un nuevo gobierno.