La mayoría de los bancos centrales, incluidos la Reserva Federal, el Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo, están estudiando el posible lanzamiento de una versión digital de sus monedas.
Gran Bretaña ha dicho que cualquier versión digital de la libra esterlina no estaría disponible antes de la segunda mitad de esta década, mientras que la Reserva Federal ha dicho que un dólar digital podría ayudar a mantener la posición internacional del billete verde.
"La clave para aprovechar todo el potencial de los CBDC es garantizar que puedan operar en diferentes mercados para facilitar los pagos transfronterizos al por mayor", dijo Kay Swinburne, presidente del Grupo de Estrategia Reguladora Internacional, un grupo de reflexión respaldado por la City y TheCityUK.
"Se necesitarán principios reguladores globales y colaboración para hacer realidad esta visión".
El IRSG afirma en un informe https://www.irsg.co.uk/publications/irsg-report-the-use-of-central-bank-digital-currencies-cbdcs-in-wholesale-markets-2 publicado el viernes que la inclusión de los CBDC en los pagos digitales al por mayor tiene muchas ventajas si se hace que sean "interoperables" para las transacciones transfronterizas.
La armonización de las normas permitiría a las empresas autorizadas en una jurisdicción prestar servicios en otra, y evitaría que los países trataran de socavar a los demás con normas más laxas, según el informe.
