El juez del Tribunal de Distrito de Estados Unidos T.S. Ellis sentenció a El Shafee Elsheikh, de 33 años, durante una audiencia en una sala del tribunal federal de Alexandria, Virginia.

Hace cuatro meses, un jurado declaró al ex ciudadano británico culpable de los cargos que incluían la toma de rehenes mortales y la conspiración para cometer un asesinato.

Tras un juicio de seis semanas en abril y horas de deliberación, el jurado concluyó que Elsheikh formaba parte de una célula del Estado Islámico, apodada "Los Beatles" por su acento inglés, que decapitó a rehenes estadounidenses en Irak y Siria.

Elsheikh, nacido en Sudán y criado en Londres, fue acusado de conspirar para matar a cuatro rehenes estadounidenses: James Foley, Steven Sotloff, Peter Kassig y Kayla Mueller.

Foley y Sotloff, ambos periodistas, y Kassig, un trabajador humanitario, fueron asesinados en decapitaciones grabadas en vídeo. Mueller fue violada repetidamente por el líder del grupo en ese momento, Abu Bakr al-Baghdadi, antes de su muerte en Siria, según han dicho funcionarios estadounidenses.

Las muertes de Foley, Sotloff y Kassig se confirmaron en 2014; la de Mueller, a principios de 2015.

Los cargos contra Elsheikh, a quien se le retiró la ciudadanía británica en 2018, conllevaban una posible condena a muerte, pero los fiscales estadounidenses habían advertido previamente a los funcionarios británicos que no solicitarían la pena de muerte.

Otro miembro de la célula, Alexanda Kotey, fue condenado a cadena perpetua por un juez estadounidense a principios de este año. Kotey fue retenido en Irak por el ejército estadounidense antes de ser trasladado a Estados Unidos para ser juzgado. Se declaró culpable el pasado septiembre de los asesinatos de Foley, Sotloff, Kassig y Mueller.

Un tercer miembro del grupo, Mohammed Emwazi, murió en un ataque de misiles británico-estadounidense en Siria en 2015.

Algunos antiguos rehenes, liberados por la célula tras prolongadas negociaciones, testificaron durante los juicios sobre las torturas que sufrieron. Los familiares de los asesinados también testificaron.

En el apogeo de su poder, entre 2014 y 2017, el Estado Islámico gobernó a millones de personas y reivindicó o inspiró atentados en decenas de ciudades de todo el mundo.

Su líder, al-Baghdadi, declaró un califato sobre una cuarta parte de Irak y Siria en 2014, antes de morir en una incursión de las fuerzas especiales estadounidenses en Siria en 2019, cuando el dominio del grupo se derrumbó.