Boeing ha registrado unas pérdidas de 3.500 millones de dólares (3.220 millones de euros) en 2022, a pesar de tener un flujo de caja positivo por primera vez desde 2018 gracias al aumento de las entregas comerciales.

El fabricante aeronáutico estadounidense sigue luchando con los problemas de la cadena de suministro y está trabajando para mejorar los resultados de su unidad Boeing Defense, que registró unas pérdidas de 3.500 millones de dólares en 2022.

Sus ventas alcanzaron los 20.000 millones de dólares en el cuarto trimestre, frente a los 14.790 millones del mismo periodo del año anterior, con una pérdida de 1,75 dólares por acción. Boeing esperaba un beneficio de 20.380 millones de dólares a 0,26 dólares por acción, según datos de Refinitiv.

"Aunque persisten los retos, estamos bien posicionados y en el buen camino para restablecer nuestra fortaleza operativa y financiera", declaró Dave Calhoun, director ejecutivo de Boeing.

Boeing dijo que espera entregar hasta 450 de sus aviones 737 MAX y entre 70 y 80 787 Dreamliners en 2023. La empresa reiteró que espera generar entre 3.000 y 5.000 millones de dólares de flujo de caja libre en 2023.

"Aunque hemos hecho progresos significativos, los retos persisten y todavía tenemos trabajo que hacer para garantizar la estabilidad de nuestras operaciones y de nuestra cadena de suministro", dijo Dave Calhoun en su correo electrónico a los empleados.

Las acciones de la empresa bajaron un 1,7% en las operaciones previas a la comercialización.

(Valerie Insinna y David Shepardson informan; Lina Golovnya, editado por Kate Entringer)