El posible acuerdo, que según una de las fuentes familiarizadas con el asunto podría alcanzar los 500 millones de dólares, se produce en un momento en que las relaciones entre los rivales regionales, Emiratos Árabes Unidos y Turquía, muestran signos de mejora.

Una de las fuentes dijo que las conversaciones se encontraban en una fase avanzada y una segunda afirmó que ambas partes estaban llevando a cabo las debidas diligencias.

"Por supuesto, no hacemos comentarios sobre rumores o especulaciones", dijo un portavoz de Aramex.

MNG Kargo declinó hacer comentarios.

Aramex, en la que ADQ compró una participación del 22,25% el año pasado, anunció esta semana que ha dividido sus negocios principales para capturar el crecimiento en la industria del transporte y la logística después de la COP19.

Como parte de la reorganización, ha creado una nueva estructura regional y ha nombrado a un director de estrategia para dirigir su expansión internacional y sus planes de fusiones y adquisiciones.

Fundada en 2003, MNG Kargo es una de las principales empresas de servicios de mensajería de Turquía, propiedad de la empresa de capital privado Turkven y de la familia Sancak desde 2017. La empresa cuenta con más de 850 sucursales y más de 11.000 empleados.

El presidente de Turquía, Tayyip Erdogan, mantuvo conversaciones con el asesor de seguridad nacional de los EAU, el jeque Tahnoun bin Zayed al-Nahyan, el mes pasado, que incluyeron la cooperación económica y la inversión de los EAU en Turquía.

El conglomerado de Abu Dhabi International Holding Co, del que Tahnoun es presidente, está buscando oportunidades de inversión en Turquía, según declaró su director general a Reuters el mes pasado.

Aunque las diferencias políticas entre los dos países son profundas, Ankara se ha esforzado por aliviar las tensiones con varias potencias árabes en relación con el conflicto de Libia, las disputas internas del Golfo y las reivindicaciones rivales sobre las aguas del Mediterráneo oriental.

Un funcionario emiratí dijo a Reuters este mes que el Estado del Golfo estaba interesado en reforzar los lazos, señalando las oportunidades de comercio e inversión en transporte, salud y energía.