Las acciones de la empresa subieron un 6,65% a 70,24 dólares en las operaciones previas a la apertura del mercado.

CarMax había puesto en marcha en diciembre una serie de medidas para ayudar a recortar costes, como ralentizar la adquisición de coches para su inventario, recortar los gastos de marketing y de capital, y reducir la plantilla "desde una base de desgaste" y pausar la contratación para su oficina corporativa.

"Nuestras medidas deliberadas para sortear las presiones a las que se enfrenta el sector del vehículo de ocasión están impulsando mejoras secuenciales en nuestro negocio", declaró el martes el consejero delegado, William Nash.

La demanda de coches usados se vio mermada durante el año pasado debido al aumento de los costes de los préstamos y al alza de los precios de las materias primas y la gasolina.

El beneficio ajustado de CarMax en el cuarto trimestre fue de 44 céntimos por acción, por encima de las estimaciones de Refinitiv IBES de 24 céntimos por acción.

Sus ingresos trimestrales se situaron en 5.720 millones de dólares, un 25,6% menos que un año antes.