El crecimiento de abonados al streaming en Estados Unidos se redujo a la mitad el año pasado, hasta el 10,1%, según datos de la firma de investigación Antenna, en otra señal de que el auge podría haber terminado para la industria en el mercado clave.

El crecimiento de la categoría de vídeo a la carta por suscripción premium se ralentizó desde el 21,6% de 2022, pero su crecimiento global se ha más que duplicado en cuatro años, lo que indica una tendencia constante a la resuscripción.

El gigante del streaming Netflix, Peacock, propiedad de Comcast, y Paramount+, de Paramount Global, impulsaron el mayor crecimiento, con un total de suscripciones de 242,9 millones a finales de 2023.

Antenna afirmó que el streaming estaba entrando en una nueva fase de sobriedad.

De estar hipercentrados en la adquisición para atraer a una audiencia masiva, los mismos actores están cambiando ahora su enfoque hacia la gestión de los abonados, afirmó.

Al principio del auge del streaming, las empresas se centraron en inyectar dinero en la creación de grandes cantidades de contenidos para atraer y retener a los abonados. Los clientes también se suscribieron a los servicios durante la pandemia mientras estaban confinados en casa, ya que las salas de cine eran inaccesibles.

Desde entonces, y con las huelgas gemelas de Hollywood del año pasado, las empresas han tratado de mantener bajo el gasto en contenidos al tiempo que impulsaban sus ofertas publicitarias para atraer ingresos.