Dayyani, la familia que está detrás de Entekhab, un grupo iraní de electrónica de consumo, presentó en 2015 una demanda de solución de controversias inversor-Estado (ISDS) contra el gobierno surcoreano alegando el incumplimiento de un acuerdo. Dijo que Seúl no le devolvió el depósito de 50 millones de dólares que pagó por una oferta fallida para comprar una participación mayoritaria en la quebrada Daewoo Electronics.

En 2018, el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones del Banco Mundial ordenó a Seúl que proporcionara una compensación por un total de 73.000 millones de wones (61,4 millones de dólares) a la familia Dayyani, pero el pago aún no se ha efectuado debido a las sanciones de Estados Unidos contra Irán.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Sur dijo el miércoles que la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro de Estados Unidos emitió una "licencia específica" el 6 de enero para permitir el pago utilizando el sistema financiero estadounidense.

"Se espera que la licencia siente importantes bases para una rápida conclusión del acuerdo ISDS con la familia Dayyani, que ha sido uno de los asuntos pendientes entre los dos países", dijo el ministerio en un comunicado, añadiendo que ayudaría a mejorar los lazos bilaterales.

El ISDS permite a una empresa de un país solicitar un arbitraje contra otro país en el que ha invertido.

El caso de Dayyani supone la primera derrota de Corea del Sur en una disputa sobre un tratado de inversión, y su apelación fue rechazada en 2019.

Washington volvió a imponer sanciones a Irán en 2018 después de que el entonces presidente Donald Trump se retirara del acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y seis grandes potencias, según el cual Teherán aceptó frenar su programa nuclear a cambio de un alivio de las sanciones estadounidenses.

Irán ha exigido repetidamente la liberación de unos 7.000 millones de dólares de sus fondos congelados en Corea del Sur, calificándolos de "rehenes."

(1 dólar = 1.188,4300 won)