Darktrace afirmó que el nombramiento del auditor EY, anteriormente conocido como Ernst & Young, era una señal de su confianza en sus procesos financieros.

Éstos fueron criticados por Quintessential Capital Management, con sede en Nueva York, en un informe de 70 páginas publicado el 31 de enero. El grupo dijo que era "profundamente escéptico sobre la validez de los estados financieros de Darktrace", lo que llevó a Darktrace a emitir una refutación.

La directora ejecutiva de Darktrace, Poppy Gustafsson, dijo entonces que la empresa estaba dirigida con "la mayor integridad".

La empresa, que empezó a cotizar en bolsa en abril de 2021, está respaldada por Mike Lynch, el empresario tecnológico británico al que un juez británico declaró autor intelectual de un elaborado fraude cuando vendió su empresa Autonomy en 2011. Lynch había negado los cargos.

Lynch y su esposa siguen siendo inversores, según los datos de Refinitiv, pero él no participa en su gestión ni forma parte de su consejo de administración, según ha declarado Darktrace.

Darktrace dijo en su declaración del lunes que era apropiado que una revisión de terceros confirmara la posición financiera de la empresa.

"El consejo cree plenamente en la solidez de los procesos y controles financieros de Darktrace. Como muestra de esa confianza, hemos encargado esta revisión independiente a terceros por parte de E&Y", declaró el presidente Gordon Hurst.

Las acciones de Darktrace han subido un 33% desde un mínimo de 198 peniques el día en que se publicó el informe crítico. El viernes cerraron a 263 peniques, lo que valora al grupo en unos 1.880 millones de libras (2.260 millones de dólares).

(1 dólar = 0,8302 libras)