El consejero delegado de Equinor afirmó el miércoles que el mercado europeo del gas seguirá siendo volátil este invierno y se enfrentará a muchas variables, pero que se encuentra en una posición más fuerte que el año pasado.

Los precios mundiales del gas saltaron a máximos históricos el año pasado después de que Rusia cortara su suministro de gas a Europa, lo que provocó importaciones récord de gas natural licuado (GNL) y esfuerzos por recortar la demanda, especialmente por parte de la industria.

Pero Europa parece mucho mejor preparada que el año pasado, con un almacenamiento de gas casi lleno, precios energéticos más bajos y nuevas fuentes de combustible.

"Europa está en un lugar mucho mejor que el año pasado... De hecho, esperamos que el mercado sea bastante volátil durante el invierno", declaró Anders Opedal en el Foro de Inteligencia Energética celebrado en Londres.

Opedal destacó las variables que rodean al mercado del gas en estos momentos, entre ellas el clima y la competencia de Asia por el GNL, una materia prima comercializada a nivel mundial.

"Haremos todo lo posible para asegurarnos de que maximizamos el gas que entra por las tuberías, pero Europa dependerá del suministro de GNL (gas natural licuado)", añadió.

Por otra parte, Opedal se mostró decepcionado por el hecho de que los reguladores neoyorquinos rechazaran a principios de mes la petición de la empresa de mejorar las condiciones de los contratos de energía eólica marina para reflejar las presiones inflacionistas.

Equinor, junto con su socio BP, planea construir los parques eólicos Empire Wind 1, Empire Wind 2 y Beacon Wind frente a la costa de Nueva York, que tienen una capacidad combinada de 3.300 megavatios, capaces de suministrar energía a 2 millones de hogares.

"Esta no es la última palabra", dijo, añadiendo que Equinor seguiría trabajando con los proveedores y los gobiernos locales para encontrar soluciones que permitan que los proyectos sigan adelante. (Reportaje de Marwa Rashad; Edición de Jane Merriman)