La empresa dijo en un comunicado que se prepara para iniciar las ventas del modelo E5 de Kaiyi a principios de este año y lanzar la producción de otros tres modelos a finales de año.

Las marcas chinas se han convertido en actores principales del mercado automovilístico ruso, lo que refleja la creciente importancia de China para la economía rusa tras el éxodo de las empresas occidentales por la decisión de Moscú de enviar tropas a Ucrania el pasado mes de febrero.

Avtotor, que anteriormente ensamblaba las marcas alemanas BMW y las surcoreanas Hyundai y Kia, también tiene acuerdos con otros dos fabricantes de automóviles chinos. Tiene previsto producir unos 50.000 automóviles en 2023, según declaró en diciembre Anton Alikhanov, gobernador de la región de Kaliningrado.

La influencia de China se deja sentir en otros sectores del mercado automovilístico. El diseño, la ingeniería y la plataforma de JAC Motors se están utilizando para revivir el Moskvich de la era soviética, cuya producción comenzó a finales del año pasado.

(1 $ = 69,9000 rublos)