El grupo inmobiliario español Colonial registró el lunes una duplicación de su beneficio neto del primer trimestre, apoyado por las rentas de alquiler ligadas a la inflación y las altas tasas de ocupación.

La firma con sede en Barcelona obtuvo un beneficio neto de 54,5 millones de euros (58,9 millones de dólares) frente a los 27,8 millones de un año antes.

Su cartera, que incluye edificios en España y Francia, aumentó un 6% en ingresos por alquileres comparables al ajustarse al alza los contratos de arrendamiento debido a la elevada inflación.

La ocupación en los edificios alquilados por el grupo se situó en el 97% de media, con los inmuebles de París a pleno rendimiento.

El resultado de su beneficio neto no incluyó una valoración actualizada de sus activos, que las empresas inmobiliarias están obligadas a presentar cada seis meses.

El sector inmobiliario se encuentra bajo presión desde finales de 2022, ya que la volatilidad de los mercados y el endurecimiento de las condiciones financieras han frenado la inversión inmobiliaria.

Se espera que el Banco Central Europeo recorte los tipos en junio, tras mantenerlos en máximos históricos desde el pasado septiembre, lo que debería hacer más atractiva la inversión inmobiliaria.

(1 dólar = 0,9256 euros) (Reportaje de Matteo Allievi; edición de David Latona y Jason Neely)