La mayor aerolínea escandinava, SAS, podría anunciar esta misma semana el resultado de una recaudación de fondos de posibles inversores que busquen rescatar a la deficitaria compañía.

SAS solicitó la protección por bancarrota en Estados Unidos el año pasado mientras luchaba por recortar costes y deudas en medio de huelgas de pilotos.

La aerolínea, que en sus días de gloria en la década de 1980 fue nombrada la mejor compañía aérea del mundo por un grupo del sector, lleva más de una década luchando por competir con sus rivales de bajo coste en el fragmentado sector de la aviación en Europa.

Ahora, golpeada por la caída de la demanda y las restricciones a los viajes durante la pandemia, SAS sigue los pasos de otras aerolíneas nacionales como la italiana ITA Airways y la portuguesa TAP en busca de nuevos inversores.

SAS espera recaudar 9.500 millones de coronas suecas (863 millones de dólares) en nuevos fondos propios y convertir 20.000 millones de coronas de deuda en capital.

¿QUIÉNES SON LOS POSIBLES LICITADORES?

El Estado danés ha dicho que está dispuesto a aumentar su participación en SAS hasta alrededor del 30% desde el 22% actual, y que está buscando uno o más accionistas para hacerse con una participación mayoritaria.

Cualquier acuerdo exigiría que SAS mantuviera Copenhague como centro clave de pasajeros, según ha declarado el Ministerio de Hacienda danés.

Otros posibles licitadores incluyen al gestor de activos estadounidense Apollo Global Management Inc, que el año pasado proporcionó a SAS 700 millones de dólares en financiación puente para que atravesara el procedimiento de quiebra. Apollo podría convertir el préstamo en capital y convertirse así en accionista mayoritario.

Una fuente familiarizada con el asunto dijo antes de que finalizara el plazo de presentación de ofertas del lunes que Apollo estaba en la "pole position" para convertirse en accionista mayoritario y que aspiraba a hacerse con una participación del 70%.

Eso pondría a prueba las normas de la Unión Europea, que impiden que más del 50% de una aerolínea comunitaria esté en manos de personas ajenas al bloque de 27 miembros.

Apollo ha argumentado que gran parte de su capital procede de inversores con sede en Europa, pero la cuestión seguía sin resolverse, según la fuente.

¿QUÉ PASA CON SUECIA Y NORUEGA?

El gobierno sueco, que también posee una participación del 22%, ha inyectado más de 8.000 millones de coronas en la empresa, pero ha rechazado la petición de SAS de obtener más efectivo.

La obtención de nuevos fondos propios reduciría automáticamente la participación sueca en la aerolínea. Suecia dijo el año pasado que buscaría salir completamente de la aerolínea a largo plazo.

El gobierno noruego también ha dicho que no aportaría nuevo capital. El país, que vendió su participación restante del 10% en 2018 pero sigue siendo un gran acreedor, dijo el año pasado que apoyaría un plan para convertir los préstamos en capital, pero que no pensaba ser accionista a largo plazo.

¿QUIÉN MÁS PUEDE PUJAR?

Es probable que Apollo y el Estado danés incorporen a varios accionistas menores, según el analista de Sydbank Jacob Pedersen.

Entre ellos podría figurar la fundación familiar sueca Wallenberg, que actualmente posee una participación del 3,4% en SAS, o fondos de pensiones daneses, dijo. El inversor privado sueco Gerald Engstrom posee el 0,8%.

El grupo aéreo alemán Lufthansa ha sido asociado previamente con la compra de SAS, pero Pedersen dijo que las ofertas de otras compañías europeas eran poco probables. Lufthansa está en proceso de hacerse con una gran parte de ITA Airways.

¿QUÉ OCURRIRÁ A PARTIR DE AHORA?

El plazo para presentar las ofertas finales finalizó el lunes.

El SAS debe anunciar la oferta ganadora el 28 de septiembre, a menos que haya varias ofertas cualificadas. En ese caso, el SAS podría celebrar una subasta el 2 de octubre y anunciar el resultado el 5 de octubre.

Las autoridades de la UE tendrán que aprobar la nueva estructura de propiedad antes de que pueda cerrarse el acuerdo. Una vez hecho esto, SAS podrá iniciar los trámites para salir de la protección por quiebra del capítulo 11, lo que podría ocurrir a finales de este año o el próximo, según Pedersen.

No está claro si SAS saldrá de la bolsa sueca tras salir de la protección por quiebra. Se ha pedido a los licitadores que digan si quieren o no que la empresa siga cotizando en bolsa.

(1$ = 10,8100 coronas noruegas)

(1$ = 11,0082 coronas suecas) (Reportaje de Johannes Birkebaek y Jacob Gronholt-Pedersen Edición de Mark Potter)