Nostra Terra Oil and Gas Company plc anuncia que el pozo Grant East #1, en la cuenca del Pérmico, al oeste de Texas, ha sido abandonado temporalmente ("TA"). Tras el anuncio de perforación del 9 de mayo, el pozo se completó en múltiples horizontes. A continuación, el pozo se estimuló con fracturación en 3 etapas y se probó.

En la prueba, el pozo fluyó con altas tasas de agua con un bajo corte de petróleo. Se hicieron varios intentos para aislar los horizontes productores de agua más profundos de las zonas petrolíferas menos profundas, pero no tuvieron éxito. El pozo ha sido suspendido hasta que se tome una decisión sobre qué hacer con el pozo existente.

El Grant East nº 1 podría utilizarse como inyector en el futuro o volver a introducirse y utilizarse como productor en función de los resultados de un futuro pozo de compensación. Actualmente no hay suficiente capacidad de tratamiento dentro del yacimiento para manejar los volúmenes de agua asociados, sin embargo, a medida que el desarrollo avanza y se amplía la capacidad de tratamiento puede ser posible producir eficientemente el Grant East #1 tal y como está terminado actualmente. El Grant East 1 se encuentra en el centro de un yacimiento de producción probada y el pozo encontró 24 pies de sección bruta de yacimiento en el Upper Clear Fork y 108 pies de sección bruta de yacimiento en el Lower Clear Fork, lo que se compara favorablemente con los pozos operados por el NTOG en un arrendamiento contiguo (los pozos Grant #5 y #6).Los primeros análisis de los resultados de producción y de los fluidos producidos indican que la estimulación de la fractura se propagó fuera de la zona e intersectó un horizonte más profundo que se utiliza como intervalo de eliminación de agua en un arrendamiento de compensación.

Esta zona más profunda está sobrepresionada y es de buena calidad de yacimiento, lo que hizo que el pozo fluyera a altas tasas de agua inyectada con un bajo corte de petróleo. Es necesario realizar trabajos técnicos adicionales para confirmar este análisis, pero los primeros indicios, y un vistazo a las tasas de bombeo y a las presiones durante la estimulación, respaldan esta conclusión.