La inversión se produce en un momento en el que India pretende fabricar cinco millones de toneladas anuales de hidrógeno verde para 2030 con el fin de cumplir sus objetivos climáticos y convertirse en un centro de producción y exportación de este combustible.

La planta de hidrógeno verde y amoníaco, que creará unos 2.000 puestos de trabajo, tendrá capacidad para producir 1,2 millones de toneladas al año. También contará con una unidad de energía solar anexa.

El hidrógeno verde, producido con energía renovable, tiene algunas de las mejores credenciales medioambientales entre los combustibles más limpios. Este combustible con cero emisiones de carbono se fabrica utilizando energía renovable procedente de fuentes eólicas o solares para dividir el agua en hidrógeno y oxígeno.

Aunque el hidrógeno verde no se fabrica actualmente en India a escala comercial, los empresarios indios Mukesh Ambani y Gautam Adani han anunciado planes para producirlo.

A principios de mayo, Karnataka firmó un acuerdo de 6.400 millones de dólares con ReNew Power, que cotiza en la bolsa de Estados Unidos, para un periodo de 7 años en proyectos energéticos en el estado.

India, con una población más de tres veces mayor que la de la Unión Europea, tiene un consumo de energía per cápita mucho menor, pero uno de los índices de crecimiento de la demanda energética más rápidos del mundo.

(1 dólar = 77,6200 rupias indias)