Mongolia ha resuelto casi todas sus cuestiones fiscales pendientes con Río Tinto sobre el desarrollo de la gigantesca mina de cobre Oyu Tolgoi y confía en que se solucionen los asuntos pendientes, según declaró a Reuters el primer ministro del país.

Los socios llevan años enzarzados en una disputa sobre el desarrollo de la mina del desierto de Gobi, que constituye la mayor inversión extranjera del país y está llamada a convertirse en la cuarta mina de cobre del mundo en 2030, a medida que se calienta la demanda del metal clave para la transición energética.

Una resolución de las cuestiones fiscales pendientes evitaría un proceso de arbitraje y significaría el restablecimiento de las relaciones con uno de los principales socios de Ríos, que en un momento fueron tan malas que amenazaron con hacer descarrilar el desarrollo de la mina.

"En el pasado, teníamos más de 10 cuestiones que abordar con Río Tinto sobre el proyecto Oyu Tolgoi, pero hemos resuelto con éxito más del 90% de ellas", declaró el primer ministro mongol, L. Oyun-Erdene, en una entrevista durante una visita a Washington.

"Aún quedan algunas cuestiones pendientes, pero confiamos en poder continuar nuestras conversaciones y discusiones con nuestros inversores para poder resolverlas, añadió.

Río Tinto compró el año pasado la mayoría de la mina a Turquoise Hill por 3.300 millones de dólares en un esfuerzo por simplificar el desarrollo de la mina, que producirá más de 500.000 toneladas métricas al año. Ahora posee una participación del 66% y el gobierno mongol el resto.

El año pasado, Rio acordó renunciar a 2.400 millones de dólares de deuda que le debía el gobierno y comprometerse a una estructura que no requiriera financiación adicional de préstamos después de que los costes de desarrollo se dispararan a 7.060 millones de dólares desde los 5.300 millones previstos en 2016.

Rio Tinto dijo en sus resultados que las conversaciones con el gobierno de Mongolia estaban en curso. Rio comenzó a producir cobre de las operaciones subterráneas en marzo y se espera que la mina de cobre sea un pilar de beneficios en los próximos años.

L. Oyun-Erdene dio crédito al consejo de Rio Tintos por haber asistido al Foro Económico de Mongolia en julio, lo que les permitió ver la situación real y tomar las decisiones adecuadas, elogiando en particular el liderazgo del presidente Dominic Barton.

Confío en que no habrá disputas en el futuro y que podremos resolver con éxito todas esas cuestiones", afirmó.

"Y esto servirá como una clara demostración de que Mongolia está abierta a los negocios y a la inversión y también contribuirá a que los inversores tengan un mayor conocimiento del clima inversor de Mongolia.

Rio dijo el mes pasado que había presentado una oferta para resolver la disputa fiscal, y su consejero delegado, Jakob Stausholm, afirmó que la "transformada relación con el gobierno mongol y el pueblo de Mongolia está creando un serio impulso". (Información de Simon Lewis y David Brunnstrom en Washington, información adicional de Melanie Burton en Melbourne; edición de)