Shinsei Bank, Limited ha anunciado los resultados consolidados y no consolidados no auditados de los nueve meses finalizados el 31 de diciembre de 2019. Para el período, sobre una base consolidada, la compañía reportó ingresos netos de intereses de 100,3 mil millones de yenes frente a 100,1 mil millones de yenes hace un año. Los ingresos totales fueron de 183.100 millones de yenes, frente a los 172.800 millones de yenes de hace un año. El beneficio atribuible a los propietarios de la matriz fue de 45.100 millones de yenes, frente a los 41.500 millones de yenes de hace un año. El BPA básico fue de 187,00 yenes, frente a los 167,32 yenes de hace un año. El BPA diluido fue de 186,96 JPY frente a los 167,30 JPY de hace un año. En el periodo, en base no consolidada, la empresa registró un margen de intereses de 75.600 millones de yenes, frente a los 77.600 millones de yenes de hace un año. Los ingresos totales fueron de 83.700 millones de yenes, frente a los 78.900 millones de yenes de hace un año. El beneficio neto fue de 30.600 millones de yenes, frente a los 23.100 millones de yenes de hace un año. El BPA básico fue de 187,00 yenes, frente a los 167,32 yenes de hace un año. El BPA diluido fue de 186,96 JPY frente a los 167,30 JPY de hace un año. Para el año 2019, la empresa espera un beneficio consolidado atribuible a los propietarios de la matriz de 53.000 millones de yenes. El beneficio neto no consolidado para 2019 se espera que sea de 33.000 millones de yenes.