La empresa, cuyos aditivos se utilizan para impermeabilizar y reforzar tejados, suelos y paredes, dijo que 2023 había sido testigo de una actividad comercial moderada en Alemania, mientras que el aumento de la inflación y la subida de los tipos de interés habían lastrado la construcción en el sector residencial estadounidense.

Aun así, la empresa apuntó a los grandes proyectos de construcción e infraestructuras que se espera que comiencen como razones para el optimismo.

"No espero que este año sea más difícil que el pasado", declaró a Reuters Thomas Hasler, Consejero Delegado.

"La indicación de que la política monetaria puede aflojarse un poco es una señal positiva para la construcción".

Hasler también destacó como positivas tendencias como la deslocalización industrial a medida que las empresas construyen fábricas en Estados Unidos, así como planes gubernamentales como la Ley de Reducción de la Inflación firmada por el presidente estadounidense Joe Biden.

Las acciones de Sika subían un 4,3% en las operaciones matinales.

La suerte de Sika, un gran proveedor para las industrias de la construcción y la automoción, puede considerarse como un indicador indirecto de la salud de ambos sectores.

La empresa dijo que esperaba que sus ventas en moneda local aumentaran entre un 6% y un 9% en 2024 y que su beneficio operativo básico aumentara a un ritmo mayor, en línea con los objetivos esbozados el pasado octubre.

Hasler dijo que el mercado de la construcción al que abastece disminuyó un 4% el año pasado, pero Sika aún así consiguió aumentar sus ventas un 1,2% antes de la contribución de las adquisiciones.

Las ventas declaradas aumentaron un 14,5% en divisas locales, impulsadas por la adquisición de MBCC, el antiguo negocio de productos químicos para la construcción de BASF.

"El mercado irá hacia el norte desde el -4, probablemente todavía -4 para todo el año, pero mejorará", dijo Hasler.

"Nuestras perspectivas de crecimiento del 6% al 9% demuestran que tenemos la ambición de batir al mercado".

Sika registró un beneficio operativo para todo el año de 1.550 millones de francos suizos (1.760 millones de dólares), igualando las previsiones de los analistas.

Su beneficio neto de 1.060 millones de francos superó por poco las previsiones de 1.040 millones, mientras que el beneficio operativo básico de 2.040 millones de francos estuvo en línea con las estimaciones.