Spexis AG ha anunciado la publicación de los resultados preclínicos de su nueva clase de antibióticos macrocíclicos peptidomiméticos, desarrollados en colaboración con la Universidad de Zúrich, que demuestran una potente actividad antimicrobiana in vitro e in vivo contra las enterobacterias multirresistentes (MDR) y extremadamente resistentes (XDR). La resistencia a los antimicrobianos (RAM) se ha convertido en una importante amenaza tanto para los pacientes como para los sistemas sanitarios. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), la RAM bacteriana está asociada a la muerte de aproximadamente 5 millones de personas al año en todo el mundo. En Estados Unidos, cada año se producen más de 2,8 millones de infecciones resistentes a los antimicrobianos, lo que provoca más de 35.000 muertes y unos costes sanitarios estimados en 4.600 millones de dólares.

A escala mundial, la OMS estima que la carga económica global derivada de la aparición de la RAM, incluido el impacto en el comercio internacional y los gastos sanitarios, podría costar a la economía mundial 100 billones de dólares estadounidenses en 2050. Las enterobacteriáceas MDR, XDR y resistentes a los carbapenemes y a la colistina, en concreto Klebsiella pneumoniae y Escherichia coli, han sido identificadas por la OMS como patógenos gramnegativos de prioridad uno en la lucha contra la RAM. Las cepas de Klebsiella pneumoniae resistentes al carbapenem que presentan hipervirulencia y resistencia se han asociado a una mortalidad global de hasta el 84%, según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC). El ECDC también proyecta que las Enterobacteriaceae resistentes tienen un alto potencial para causar brotes en entornos sanitarios y comunitarios, siendo la diseminación global una de las principales preocupaciones.

A medida que aumenta el uso de antibióticos, se incrementan las presiones selectivas sobre los microbios, lo que a menudo conduce al desarrollo de resistencias. El reciente descubrimiento de genes transferibles de resistencia a la colistina mediados por plásmidos ha demostrado la facilidad con la que puede propagarse la resistencia en las poblaciones bacterianas. Estos genes transferibles se transmiten a menudo con otros genes de resistencia, dando lugar a cepas de bacterias multirresistentes.

Los datos de un estudio de cohortes prospectivo multinacional publicado en The Lancet mostraron que la resistencia a los carbapenemes se asociaba a una mayor duración de las estancias hospitalarias y a una mayor probabilidad de mortalidad intrahospitalaria. Incluso los países con un uso juicioso de los antibióticos han visto duplicarse la prevalencia de la resistencia en los últimos 5 años, según un estudio publicado en el British Medical Journal.