El bitcoin, la mayor criptodivisa, alcanzó un nuevo máximo histórico de 73.794 dólares la semana pasada y ha ganado un 50% en lo que va de año, arrastrando consigo a los precios de otras criptodivisas.

"La acción del precio [...] todavía ha sido impulsada por los minoristas principalmente. Pero son las instituciones las que hemos empezado a ver entrar", dijo McDermott, hablando en la conferencia Digital Asset Summit (DAS) en Londres. "Ahora realmente se ve que el apetito se ha transformado".

Goldman Sachs lanzó una mesa de negociación de criptomonedas en 2021 y sigue desarrollándola, dijo McDermott.

"El año pasado fue duro, pero al llegar a este año hemos visto un gran cambio, no sólo en cuanto a los tipos de clientes, sino también en cuanto a los volúmenes", dijo.

Nadie sabe a ciencia cierta qué está impulsando las últimas ganancias del bitcoin, aunque los analistas apuntan a los miles de millones de dólares que han fluido hacia los ETF estadounidenses de bitcoin al contado que se lanzaron este año. McDermott dijo que los ETF provocaron un "cambio psicológico".

El repunte del bitcoin se ha enfriado ligeramente en los últimos días, junto con otros activos de mayor riesgo, tras la publicación de una serie de datos estadounidenses que sugerían que la Reserva Federal podría no recortar los tipos de interés este año tanto como se esperaba.

Los reguladores llevan tiempo advirtiendo de que el bitcoin es un activo de alto riesgo, con casos de uso limitados en el mundo real.

Las criptodivisas se dispararon durante 2020 y 2021, cuando los tipos de interés ultrabajos ayudaron a impulsar la inversión especulativa.

Al auge de la era de la pandemia le siguió un fuerte desplome en 2022, cuando una serie de quiebras y fracasos en las mayores empresas de criptomonedas, incluida FTX, borraron 2 billones de dólares del mercado de criptomonedas y dejaron a millones de inversores sin dinero.

McDermott dijo que había "un cierto componente de apalancamiento en el sistema", pero no la misma "hipérbole" que durante 2021 y 2022.