La inflación ha disminuido de forma constante desde el máximo de 14 años alcanzado en enero y se ralentizó por cuarto mes consecutivo en mayo hasta el 6,1%, aunque sigue estando muy por encima del rango objetivo del 2-4%.
El gobernador del Bangko Sentral ng Pilipinas (BSP), Felipe Medalla, dijo el lunes que las expectativas de que la inflación caiga por debajo del 4% antes de fin de año es "una buena razón para hacer una pausa".
Los 24 economistas encuestados entre el 13 y el 19 de junio pronostican que el BSP mantendrá su tipo de interés de referencia a un día en el 6,25% en su reunión de política monetaria del 22 de junio.
Una gran mayoría de los encuestados, 14 de 17, pronostican que los tipos se mantendrán en el 6,25% durante el resto del año y los tres restantes prevén un recorte de los tipos para finales de 2023.
El banco central, que hasta ahora había seguido de cerca a la Reserva Federal estadounidense en la subida de los tipos de interés, está trazando ahora un rumbo distinto.
El vicegobernador del BSP, Francisco Dakila Jr., dijo el jueves pasado que puede que no se mueva en total sintonía con la Reserva Federal si la inflación nacional justifica una respuesta diferente.
"Lo que afectará al BSP es el hecho de que no empezarán a recortar antes si la Fed sigue siendo halcón", dijo Shreya Sodhani, economista regional de Barclays.
"En reuniones posteriores, si la Fed sube, es probable que el BSP se mantenga a la espera. Pero cuando la Fed empiece a recortar, será entonces cuando el BSP empiece de nuevo a replicar lo que está haciendo la Fed".
La Fed mantuvo los tipos de interés sin cambios en el 5,00%-5,25% la semana pasada, pero señaló que aún podría subir hasta medio punto porcentual a finales de 2023.
Entre los economistas que tenían una visión a más largo plazo sobre los tipos, más del 70% de los encuestados, 10 de 14, pronosticaron que el BSP recortará los tipos hasta el 6,0% o menos en el primer trimestre de 2024, mientras que los cuatro restantes pronosticaron que los tipos se mantendrán sin cambios.
