Los mercados están deseosos de negociar recortes de tipos y los grandes bancos centrales están contraatacando, lo que arroja nueva luz sobre los próximos datos en ese tira y afloja.

China sigue luchando contra sus demonios inmobiliarios, mientras que a Italia le toca estar en el ojo de las agencias de calificación después de que Moody's rebajara el viernes a "negativa" la perspectiva de la calificación de Estados Unidos.

Lewis Krauskopf desde Nueva York, Kevin Buckland desde Tokio, Danilo Masoni desde Milán y Alun John y Dhara Ranasinghe desde Londres le ofrecen las claves de la semana.

1/ VIGILANCIA DE LA INFLACIÓN

Una serie de responsables políticos de la Reserva Federal, incluido su jefe Jerome Powell, afirman que aún no están seguros de que los tipos sean lo suficientemente altos como para acabar con la inflación.

Los operadores, que anticipan unos tres recortes de tipos de la Fed de un cuarto de punto para el próximo año, centrarán ahora su atención en los datos de inflación del martes para confirmar su opinión sobre las perspectivas.

Se espera que el índice de precios al consumo de octubre haya subido un 0,1% mensual, según un sondeo de Reuters. El IPC de septiembre subió un 0,4% debido a un aumento sorpresa de los costes de alquiler, pero también mostró una moderación de las presiones inflacionistas subyacentes.

Un enfriamiento más brusco podría avivar las conversaciones sobre los tipos máximos, alimentadas por el informe de empleo de octubre, que apuntaba a una relajación de los mercados laborales.

Mientras tanto, se avecina un cierre del gobierno federal si los legisladores en Washington no son capaces de aprobar una medida para financiar al menos temporalmente las operaciones antes de la fecha límite del 17 de noviembre.

Las nuevas disputas podrían renovar las preocupaciones sobre la gobernanza en la mayor economía del mundo.

2/ PROBLEMAS EN CASA

La pregunta de quién se quedará con la bolsa llena con el lío inmobiliario de China puede haber quedado en cierto modo resuelta, para disgusto de los accionistas de Ping An.

Reuters informa de que Pekín pidió a la aseguradora que tomara el control de la alicaída Country Garden, la mayor promotora privada de China.

Las acciones de Ping An cayeron a mínimos de un año, a pesar de los desmentidos de la compañía. Las preocupaciones sobre el sector siguen pesando.

Las medidas gubernamentales para apuntalar la economía han fracasado repetidamente este año, lo que no ha disuadido al banco central chino de afirmar que se puede alcanzar el objetivo de crecimiento del 5%, una opinión que comparte el FMI.

Los datos han apuntado en la dirección contraria, con más pruebas de ralentización de las fábricas y tibieza del consumo. Los mercados verán el miércoles si esa tendencia continúa, con los datos de ventas minoristas y producción industrial de octubre.

3/ UNA VEZ MORDIDA

El robusto dólar parece de repente vulnerable a los vaivenes de las apuestas del mercado por un recorte de los tipos de la Fed.

Un rebote gracias a que el jefe de la Fed, Powell, se retractó de los rumores de que los tipos han tocado techo puede no durar, ya que los bajistas del dólar confían en que los recortes de tipos sean probables el año que viene.

Tomemos como ejemplo la última encuesta de Reuters: casi dos tercios de los analistas afirman que es probable que el dólar cotice a la baja a finales de año.

Las posiciones largas en dólares están disminuyendo. SocGen calcula que el dólar/yen podría retroceder hasta alrededor de 145-150. El lunes alcanzó máximos de un año en 151,80.

Las conversaciones sobre la bajada de tipos son negativas para el dólar, pero una fuerte ralentización de la economía estadounidense que perjudique al mundo podría hacer que volviera rápidamente la demanda de la divisa refugio.

4/ EL CUADRO DE MANDO DE SUNAK

La inflación en el Reino Unido ha sido más rígida que en la mayoría de las economías desarrolladas.

Son malas noticias para los consumidores, el Banco de Inglaterra y el primer ministro Rishi Sunak, que se comprometió a principios de 2023 a reducir a la mitad la inflación, que entonces se situaba por encima del 10%, para finales de año.

Los datos del IPC de octubre, previstos para el miércoles, mostrarán si Sunak empieza a acercarse a ese objetivo. Es probable una desaceleración respecto al 6,7% de septiembre, pero ¿en cuánto?

Los datos también podrían ayudar a justificar, o cuestionar, las recientes declaraciones del economista jefe del Banco de Inglaterra, Huw Pill, de que a mediados de 2024 podría ser el momento de recortar los tipos. Las últimas cifras de empleo británicas, las ventas minoristas y el índice de precios al productor también están en el calendario.

Los datos flash del PIB del tercer trimestre de la zona euro, que se publican el martes, están en el punto de mira dados los signos de debilidad económica en Alemania, la mayor economía del bloque, y descrita por algunos este año como el "enfermo de Europa".

5/ RIESGO EN ITALIA

Italia vuelve a estar en la lista de preocupaciones, con muchos inversores preocupados por los crecientes riesgos fiscales que evitan una gran exposición a la tercera economía de la zona euro.

Moody's, que califica a Italia sólo un escalón por encima de la categoría de basura con perspectiva negativa, revisa el soberano el 17 de noviembre. La última revisión de Fitch está prevista para después del cierre del mercado del viernes.

Una rebaja de la calificación de Moody's es el mayor riesgo, dada su perspectiva sobre Italia, y una medida de este tipo podría hacer que la estrechamente vigilada diferencia de rendimiento de los bonos a 10 años respecto a Alemania se disparara hasta los 250 puntos básicos, con posibles ramificaciones en toda la periferia.

Mientras tanto, las acciones italianas cotizan con un descuento del 50% respecto a las mundiales, la mayor diferencia desde 1988.

Hay un resquicio de esperanza. Unos balances más sólidos significan que los bancos son menos vulnerables a las turbulencias de los bonos que en el pasado y, con partes del mercado de renta variable tan descontadas, algunos ven una oportunidad de compra que no se puede ignorar.