El déficit primario del gobierno central de Brasil en noviembre superó las expectativas del mercado debido a un importante aumento del gasto, mostraron el miércoles datos del Tesoro.

El déficit de 39.400 millones de reales superó la previsión de 35.500 millones de reales de los economistas encuestados por Reuters. Los gastos totales aumentaron un 20% en términos reales desde noviembre de 2022, mientras que los ingresos netos crecieron un 4,2%.

En un comunicado, el Tesoro dijo que los gastos aumentaron debido a su financiación de 11.300 millones de reales a los estados y municipios en noviembre; a un mayor gasto en sanidad, educación, el programa de asistencia social Bolsa Familia y las prestaciones de pensiones.

En lo que va de año, el déficit primario alcanzó los 114.600 millones de reales, revirtiendo el superávit de 49.700 millones de reales del periodo del año anterior, tras un pronunciado deterioro fiscal provocado principalmente por el mayor gasto bajo la administración del presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.

La semana pasada, el ministro de Finanzas, Fernando Haddad, estimó que el déficit primario de 2023, teniendo en cuenta la metodología del Tesoro, rondaría los

130.000 millones de reales

o el 1,3% del producto interior bruto de Brasil. Su secretario del Tesoro, Rogerio Ceron

proyectó

el miércoles un déficit anual de 125.000 millones de reales.

Haddad y su equipo económico habían aspirado a un déficit equivalente al 1% del PIB este año, pero recientemente han reconocido que no sería alcanzable.

(1$ = 4,8283 reales) (Reportaje de Marcela Ayres; Edición de Richard Chang)