El organismo de control antimonopolio de Brasil, el CADE, aprobó el miércoles la adquisición por parte de la comercializadora de granos estadounidense Cargill de las tres plantas trituradoras de soja brasileñas de Granol.

La empresa estadounidense anunció el mes pasado una oferta vinculante para comprar las plantas trituradoras de soja en su intento de impulsar la producción de biodiésel y ampliar sus operaciones en el mayor productor mundial de soja.

La aprobación, publicada en el boletín oficial del país el miércoles por la tarde, también permite la adquisición por parte de Cargill de las plantas de biodiésel de los complejos industriales de Granol situados en las ciudades de Anápolis, Porto Nacional y Cachoeira do Sul.

Con la aprobación, la empresa estadounidense tendrá nueve plantas brasileñas de trituración de soja, igualando a Bunge, según datos del lobby de oleaginosas Abiove.

Cargill no hizo comentarios inmediatos sobre el asunto. No se reveló información sobre el valor del acuerdo.

Granol mantiene dos plantas de procesamiento de soja en el estado de Sao Paulo que producen aceite y harina de soja. (Reportaje de Roberto Samora; Redacción de Carolina Pulice; Edición de Brendan O'Boyle y Lincoln Feast)