Fitch dejó sin cambios la propia calificación "AA" como parte de una revisión periódica. Prevé que Gran Bretaña entre en una leve recesión este año y sufra una inflación superior a la de sus pares.

"Las fortalezas se contraponen a la elevada deuda pública y externa, y a la incertidumbre que persiste sobre la forma final de la relación económica entre el Reino Unido y la UE tras el Brexit", señaló Fitch en un comunicado.

Aunque Gran Bretaña ha evitado la recesión que se esperaba ampliamente a finales del año pasado, la mayoría de los analistas de previsiones como Fitch siguen pensando que su economía es susceptible de una mayor inflación y un crecimiento más lento que muchos de sus homólogos.

Tanto Gran Bretaña como Italia registraron en abril la mayor tasa de inflación de los precios al consumo entre las siete mayores economías avanzadas del mundo.

La producción económica británica durante el primer trimestre se mantuvo ligeramente por debajo de su nivel anterior a la pandemia de finales de 2019, un récord sólo compartido por Alemania entre el Grupo de los Siete.

Anteriormente el viernes, Fitch y la agencia de calificación rival Standard and Poor's afirmaron perspectivas negativas para Estados Unidos y Francia, respectivamente.