La UE está debatiendo su undécimo paquete de sanciones desde que Rusia invadió Ucrania, destinado a centrarse en quienes eluden las restricciones comerciales existentes.
El Ejecutivo del bloque propuso incluir en la lista negra a varias empresas chinas e introducir un nuevo mecanismo que restrinja las exportaciones de la UE a los países que burlen las sanciones.
Esta última parte suscitó la preocupación de Alemania, según las fuentes. Otros países también hablaron de la necesidad de encontrar un equilibrio entre la aplicación de las sanciones y la alteración de los lazos diplomáticos y comerciales internacionales, señalaron.
Italia respaldó la propuesta de Alemania de apuntar a las empresas extranjeras, en lugar de a los países, por cualquier elusión de las sanciones, según las fuentes familiarizadas con la discusión del miércoles, celebrada a puerta cerrada. Los diplomáticos hablaron bajo condición de anonimato el jueves.
La misión diplomática de Alemania ante la UE declinó hacer comentarios.
Fuentes del gobierno alemán en Berlín se mostraron críticas con la idea de convertir las sanciones de la UE en "extraterritoriales" en un intento de luchar contra la elusión.
