Chang, de 62 años, es el último diplomático de carrera nombrado para un puesto diplomático y de seguridad de alto perfil por Yoon, que empleó a algunos cargos políticos en sus primeros días en el cargo.

"Siento una mayor responsabilidad en un momento en el que un orden global que ha existido durante más de tres décadas se enfrenta a una nueva fase", declaró Chang a los periodistas.

Su nombramiento se produce en un momento en que Seúl trata de navegar por un panorama de seguridad cada vez más complejo en el noreste de Asia y más allá, y de prepararse para las elecciones presidenciales estadounidenses del próximo año.

Pensador estratégico ampliamente respetado y antiguo embajador en Rusia, Chang cuenta con años de experiencia en negociaciones y política de seguridad entre Estados Unidos y Corea del Norte.

Sucede a Cho Tae-yong, recientemente nombrado nuevo jefe de los servicios de inteligencia, a partir del 1 de enero.

La tensión con Corea del Norte se ha recrudecido este año después de que Pyongyang lanzara un satélite espía y un misil balístico intercontinental, mientras Seúl se esforzaba por reforzar su alianza con Estados Unidos y mejorar los lazos de seguridad con Japón.

Chang se comprometió a fomentar el progreso en la cuestión nuclear norcoreana y a "normalizar" los lazos entre los vecinos, al tiempo que estrechaba los vínculos con Washington y Tokio.

La última remodelación de Yoon también lleva a su jefe de política, Lee Kwan-sup, al puesto de jefe de gabinete, mientras que Sung Tae-yoon, economista de la Universidad de Yonsei, ocupa el lugar de Lee.

Kim Hong-kyun, antiguo negociador nuclear experto en Corea del Norte, fue elegido viceministro de Asuntos Exteriores.