La planta rusa de procesamiento de gas de Astracán, controlada por el gigante energético Gazprom, detuvo la producción de gasóleo y gasolina el 31 de marzo debido a un mantenimiento no planificado, según informaron el martes a Reuters dos fuentes del sector.

Una de las fuentes dijo que la planta, situada a orillas del mar Caspio, intentará reiniciar la producción el domingo.

Aunque la capacidad de la planta no es enormemente significativa para Rusia, es probable que su parada aumente las preocupaciones de Moscú en medio de la interrupción a gran escala de la capacidad de las refinerías debido a los ataques de drones ucranianos.

La razón y los detalles de la interrupción no estaban claros de inmediato. Los funcionarios de Gazprom no estaban disponibles para hacer comentarios inmediatos.

Dos operadores dijeron que recibieron una notificación de la Bolsa Mercantil Internacional de San Petersburgo sobre la suspensión de las ventas de gasóleo y gasolina de la planta debido a una parada imprevista de la producción de productos petrolíferos.

La planta es capaz de procesar unas 8.340 toneladas métricas de condensado de gas al día.

En 2023 produjo 703.000 toneladas de gasolina, o el 1,6% del total de Rusia, así como 492.000 toneladas de gasóleo (0,6%) y 299.000 toneladas de fuelóleo (0,7%). (Reportaje de Reuters; redacción de Vladimir Soldatkin, edición de Emelia Sithole-Matarise)