"2024 será más difícil de lo esperado, 2025 probablemente también", dijo Hartung, añadiendo que la empresa estaba debatiendo hasta qué punto retrasar sus objetivos de beneficios e ingresos.

"No podremos evitar recortes de empleo en las áreas afectadas", añadió, señalando la necesidad de que el proveedor automovilístico realice la transición hacia los vehículos de propulsión eléctrica.

El proveedor tenía como objetivo un margen de beneficios del 5% para 2023, un objetivo que Hartung dijo que todavía era alcanzable pero que se enfrentaba a cierta incertidumbre debido a los riesgos de cambio de divisas en China y Turquía.