El Grupo del Banco Mundial declaró el lunes que había puesto en marcha una nueva plataforma de ventanilla única de garantías de préstamos e inversiones con la que espera triplicar la provisión de garantías y seguros de riesgo ofrecidos en todo el mundo hasta alcanzar los 20.000 millones de dólares anuales.

El objetivo, que quiere alcanzar para 2030 y que pretende impulsar la inversión en zonas de mayor riesgo desde África hasta Ucrania, combinará unidades clave del Banco Mundial, la Corporación Financiera Internacional (CFI) y el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (OMGI).

Hiroshi Matano, vicepresidente ejecutivo del OMGI, declaró a Reuters que con la combinación empezaría a respaldar nuevas financiaciones innovadoras, como créditos de carbono, canjes de deuda por naturaleza y soluciones energéticas fuera de la red en zonas remotas de África.

Las garantías también podrían utilizarse para atraer a inversores del sector privado que proporcionen financiación de "absorción" para sustituir a los préstamos estándar del Banco Mundial o de la CFI, liberando así la capacidad global de préstamo.

Dijo que con la generalización de los productos de garantía en todo el Grupo del Banco Mundial, se desarrollarían nuevos usos para ellos, y añadió: "Cómo se utilicen, creo que es donde podemos ser realmente innovadores y creativos".

A modo de contexto, el Grupo del Banco Mundial concedió casi 6.500 millones de dólares en garantías el año pasado y espera proporcionar unos 10.000 millones este año, por lo que el objetivo supondrá una enorme expansión y engrosará el balance del OMGI, que actualmente se sitúa en torno a los 30.000 millones de dólares.

Cuando se le preguntó si las cantidades anuales podrían incluso superar el objetivo de 20.000 millones de dólares, añadió que el presidente del Banco Mundial, "Ajay (Banga), quiere que seamos ambiciosos, así que si hay demanda, por supuesto, lo consideraremos".

Los cambios son los primeros resultados tangibles de un grupo de ejecutivos de inversiones del sector privado reunido el año pasado por Banga, bautizado como Laboratorio de Inversiones del Sector Privado, para desarrollar ideas que atraigan más capital privado hacia las energías limpias y otras inversiones en los países en desarrollo.

El plan pretende simplificar los productos de garantía en un único menú completo que permita a los clientes identificar y seleccionar fácilmente el instrumento que mejor se adapte a sus necesidades.

Un nuevo enfoque común debería normalizar las revisiones de las garantías, sustituyendo un mosaico de diferentes procesos, reglas y normas. (Reportaje de Marc Jones en Londres y David Lawder en Washington; Edición de Toby Chopra y Stephen Coates)