La gobernadora de las islas Batanes, a menos de 200 km (125 millas) de Taiwán, dijo en agosto que había buscado financiación estadounidense para un nuevo puerto allí. La embajada estadounidense había confirmado entonces que sus diplomáticos y expertos del Ejército estadounidense en el Pacífico (USARPAC) habían estado dialogando con las autoridades locales sobre diversas medidas de apoyo a las islas.

"Al principio dijeron que ayudarían pero después ya no, así que pedí ayuda a la PPA", dijo a Reuters la gobernadora Marilou Cayco en un mensaje, refiriéndose a la Autoridad Portuaria de Filipinas (PPA).

El proyecto pretendía ayudar a la descarga de carga de la capital, Manila, durante los mares agitados de la estación de los monzones, cuando las instalaciones existentes son a menudo inaccesibles.

La embajada estadounidense dijo el viernes que no tenía comentarios inmediatos sobre el asunto.

La implicación militar estadounidense en el puerto de Batanes podría haber avivado la tensión en un momento de crecientes fricciones con China y de impulso por parte de Washington para intensificar sus antiguos compromisos de defensa con Filipinas, que Pekín ha visto con recelo.

El canal de Bashi, entre las islas Batanes y Taiwán, se considera un punto de estrangulamiento para los buques que se desplazan entre el Pacífico occidental y el disputado mar de la China Meridional y sería una vía fluvial clave en caso de una invasión china de Taiwán.

El ejército chino envía regularmente barcos y aviones a través del canal, según ha declarado el Ministerio de Defensa de Taiwán.

En una declaración difundida a los medios de comunicación el viernes, la embajada china en Manila afirmó que Taiwán era un asunto interno de China, por lo que nunca debería convertirse en un problema entre China y Filipinas.

No quedó claro de inmediato a qué respondía la declaración.

"Cualquier intento de implicar la cuestión de Taiwán en las disputas marítimas entre China y Filipinas es peligroso", dijo la embajada en un comunicado, sin dar más detalles sobre el peligro.

Cuando se le preguntó por qué Estados Unidos ya no participaba en el proyecto portuario, Cayco dijo que no lo sabía. "En realidad, acabamos de hacer una propuesta y como eso no es seguro, habíamos pedido ayuda a la APP".