Los aplausos resonaron el jueves en el parqué de una sala de negociación de Tokio cuando las acciones japonesas alcanzaron su nivel más alto de la historia, superando un récord establecido durante la burbuja económica de los años 80 y que durante mucho tiempo se consideró inquebrantable.

Unos 20 operadores del parqué tokiota de la correduría Nomura se pusieron en pie instantes después de la pausa del mediodía, y cuando el índice bursátil Nikkei superó su récord histórico de 38.957,44, establecido en diciembre de 1989.

En el tablón que tenían delante parpadeaba el nuevo récord de 39.029 que el índice tocó a las 12:32 p.m. (0332 GMT). Algunos aplaudieron mientras otros lanzaban vítores apagados junto a un solitario "bravo".

En la sesión matinal se habían desatado vítores más animados y aplausos prolongados cuando el Nikkei superó su anterior máximo histórico de cierre de 38.915. (Reportaje de Anton Bridge; Edición de David Dolan y Chang-Ran Kim)