Arabia Saudí ha revisado al alza las estimaciones de sus recursos minerales sin explotar, incluidos el fosfato, el oro y las tierras raras, hasta 2,5 billones de dólares, frente a una previsión para 2016 de 1,3 billones, según ha declarado su ministro de Minería.

La minería es una parte clave de los esfuerzos de Riad por construir una economía que no dependa en gran medida del petróleo, lo que implica un cambio hacia el aprovechamiento de las vastas reservas de fosfato, oro, cobre y bauxita.

Su Compañía Minera de Arabia Saudí, conocida como Ma'aden y creada en 1997, ya produce algunos de estos minerales.

"Hoy creemos que el potencial de nuestras reservas ha crecido ya un 90%", declaró a Reuters en una entrevista el ministro de Minas, Bandar Al-Khorayef.

"Este aumento de 1,2 billones de dólares es una combinación de más de lo que tenemos, como el fosfato, y de lo nuevo, como las tierras raras, y de la revalorización de los precios (de las materias primas)", añadió. El miércoles se hará un anuncio formal durante el encuentro minero Future Minerals Forum (FMF).

Al-Khorayef dijo que el 10% del aumento de la estimación procede de la incorporación de minerales de tierras raras, importantes para los vehículos eléctricos y los productos de alta tecnología.

Arabia Saudí también tiene previsto conceder este año más de 30 licencias de exploración minera a inversores internacionales, afirmó.

Añadió que el reino anunciará una nueva normativa que permite al ministerio de minería ofrecer zonas de exploración más amplias, de más de 2.000 kilómetros, para cada licencia.

"Una de las cosas que hemos oído de los actores globales... es que el tamaño de las áreas (adjudicadas) probablemente no es tan grande como ellos quieren".

Riad ha empezado a conceder licencias a los mineros internacionales en 2022.

Al-Khorayef también ha dicho anteriormente que el reino planea pasar de la exploración y la extracción al procesamiento y la fabricación.

"Arabia Saudí podría ser un buen lugar para el procesamiento de diferentes minerales donde vemos que los minerales que se extraen en África se procesan aquí".

Como parte de su impulso para diversificarse de los combustibles fósiles, Arabia Saudí también ha creado el fondo de inversión Manara Minerals, una empresa conjunta entre Ma'aden y el Fondo de Inversión Pública (PIF), para comprar activos en el extranjero.

Su primera gran incursión en el extranjero fue un acuerdo para convertirse en accionista del 10% de la unidad de cobre y níquel de Vale, valorada en 26.000 millones de dólares, el pasado mes de julio.

"La dirección de Manara está mirando a su alrededor, buscando diferentes activos para comprar o asociarse con diferentes países".